Casi imitando la política que adoptó Misiones desde la salida de la crisis del 2001-2002, el presidente Javier Milei anunció hoy que “la Argentina dejará de tomar nueva deuda”.
Se trata de otro anuncio de alto voltaje del presidente Javier Milei, que genera impacto y también abre interrogantes sobre si será o no capaz de cumplirlo en los hechos, dado que cada vez que la Argentina pudo, se endeudó y muchas veces de forma irresponsable.
Esto significa que no acudirá más al mercado de bonos (que además hoy se encuentra cerrado) para colocar deuda nueva, en cambio si seguirá “pateando adelante” vencimientos que se van produciendo, y donde el país debe prorrogar con nuevos títulos los que vencen, porque no tiene los dólares o los pesos y no quiere emitir para cancelarlos.
El anuncio lo hizo hoy el presidente Javier Milei en el marco de una exposición ante empresarios en el Council of the Americas, cuando se refirió al Presupuesto 2025 cuyo proyecto está pronto a enviarse al Congreso.
El presidente explicó que va a cambiar la metodología cómo se hace el Presupuesto. Normalmente, el Gobierno computa los gastos, estima los ingresos y la diferencia (siempre suelen ser más los gastos) lo soluciona con “financiamiento”.
Ahora Milei va a hacer la cuenta distinto. Primero la variable que no se toca será la del superávit o equilibrio, y de allí para atrás se acomodarán las variables como los gastos o egresos.
“Les quiero adelantar algo de lo que vamos a hacer en el presupuesto: vamos a rediseñar la forma en la que se escribe. El presupuesto se plantea un conjunto de gastos, se hace una estimación de ingresos y de ahí deriva el resultado primario, sale el financiamiento. Nosotros decidimos que no vamos a utilizar esa metodología. La metodología se va a llamar ‘déficit cero’”, explicó.
“Implica que el resultado financiero es cero, por lo tanto no necesito estar tomando nueva deuda”, agregó.
Y Milei, luego remarcó: “La Argentina deja de tomar nueva deuda”.
La política de Misiones
Esta política, se parece mucho a la que implementó Carlos Rovira desde que asumió como gobernador, y que se hizo especialmente patente en los momentos en los que la Argentina tuvo acceso abundante a los mercados de capitales.
Esto fue durante el gobierno de Nestor Kirchner y el primero de CFK, y también un período de dos años del gobierno de Mauricio Macri, hasta la corrida de mayo del 2018 cuando a la Argentina se le cerró el acceso a los mercados y tuvo que salir a pedir asistencia al FMI, poco después vino el cepo.
En esos momentos, mientras más de la mitad de las provincias corrieron a endeudarse en dólares, Misiones resistió la tentación de obtener recursos fáciles, pensando en que después en este país vienen las corridas cambiarias, los cepos, las devaluaciones y la escasez de divisas para cancelar las deudas. Y eso termina comprometiendo los recursos de las provincias que deben recortar gastos en obras o incluso en salud, educación o seguridad.
“En la época de Macri nos venían a ofrecer colocar bonos por 200 millones de dólares, nos llamaban los bancos y parecían las financieras de la calle Bolívar ofreciendo créditos personales pre-aprobados”, contó hace dos años el ministro de Economía, Adolfo Safrán, a Plan B, sobre aquella época.
Tal cual dijo Milei hoy, Misiones si en cambio “rolleó” o postergó (refinanció) deuda ya vieja, porque le convenía financieramente. Como la que tenía con el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses (las ex AFJP) y por la cual emitió bonos que periódicamente recibne la calificación de la agencia Moody´s.
El presupuesto, desde el equilibrio para atrás
La otra práctica que anunció hoy Milei, y que es muy novedosa para el Gobierno Nacional, el gobierno provincial lo viene practicando desde hace más de 20 años.
Consiste en armar el Presupuesto sin resignar el equilibrio fiscal, sin poner gastos que luego no tienen su correspondiente partida o ingreso respaldatorio. Eso no es gratis, implica tomar decisiones, darle a uno si y al otro no.
De esta forma, Misiones ostentó casi siempre equilibrio fiscal en todos o casi todos los años desde la salida de la crisis del 2001-2002. Lo remarcó el gobernador Hugo Passalacqua el 31 de julio pasado, cuando envió el Proyecto de Presupuesto de la provincia a la Legislatura.
“El Gobierno provincial dispone de la fortaleza que brindan una administración ordenada de sus recursos (sin déficit fiscal desde hace más de 20 años, y sin aplicar políticas de ajuste) y uno de los niveles de deuda pública más bajos de todas las jurisdicciones del país”, dijo en su cuenta de twitter el ministro de Hacienda, Adolfo Safrán.
Safrán explicó que los pagos de la deuda en 2025 representarán una porción muy chica el año próximo: “Erogaciones que en el Presupuesto 2025 representan solamente 0,17%, reduciendo aún más su participación respecto a 2024”, indicó.
Plan B/ 14-8-2024