Por Martín Boerr
Así como Buenos Aires y Rio Negro tironearon por la radicación de la primera mega inversión bajo los beneficios del Regimen de Incentivos para Grandes Inversiones o RIGI, en el Nordeste Argentino, Misiones y Corrientes están llevando adelante una puja similar, a veces secreta y otras abiertamente.
Esta semana se conoció que YPF, en sociedad con Petronas, destinarán el proyecto para construir una planta de GNL para exportar el gas de Vaca Muerta finalmente a Río Negro y no a Bahía Blanca, el otro lugar que es lo disputaba. Para Buenos Aires fue un duro golpe porque se trata de una inversión de 40.000 millones de dólares, que dicen, es la más grande de la historia argentina.
Con el RIGI ya en marcha y aprobado en la Ley Ómnibus hace dos meses, Misiones y Corrientes también aceitan los mecanismos para atraer una gran inversión al sector de la forestoindustria.
Según las consultas que realizó Plan B entre expertos del sector, el rubro que tiene más posibilidades es una nueva planta de pasta celulósica, como la que Arauco Argentina (ex Alto Paraná) tiene en Puerto Esperanza, pero con una producción de 1 millón de toneladas o más y una inversión superior a los 2.000 millones de dólares.
Misiones y Corrientes quieren esa inversión, que podría venir de varios grupos, incluyendo al propio Arauco, el segundo mayor productor de pasta celulósica del mundo, solamente superado por el brasileño Suzano y por encima de la también chilena CMPC (que aquí tiene forestaciones con Bosques del Plata, pero no fábrica).
Otros candidatos son Central Puerto, CMPC o grupos del exterior europeos o chinos que hace tiempo vienen mirando la Argentina. Son varios los proyectos en carpeta, incluso con estudios de factibilidad, hechos tanto para Misiones como para Corrientes por consultoras internacionales como Pöyry, líder en este sector.
Pero a esta posibilidad de una nueva planta de pasta celulósica o incluso más de una (se estima que la Argentina tiene capacidad para la instalación de 3 o 4 de estas inversiones), se agrega ahora, la posibilidad de una industria papelera, que integre la producción de pasta celulósica. Es decir, que complete el proceso.
El dato surgió de charlas entre este diario y fuentes de la industria forestoindustrial con conocimientos de todas estas conversaciones. Todo el mundo piensa que las grandes inversiones pueden venir en pasta celulósica, pero el papel también tiene un gran atractivo y mucho más con la reactivación de los puertos fluviales (es un negocio de gran volumen y se requiere costos bajos de logística).
La trama secreta
Apenas se sancionó la Ley Ómnibus que incluía el RIGI, un régimen que promete estabilidad fiscal, de amplias desgravaciones para importar bienes de capitales y suma otros incentivos a inversiones de más de 200 millones de dólares, CONFIAR que es la cámara que aglutina a gigantes como Arauco Argentina, Celulosa Argentina, Arcor/Zucamor, Ledesma y Papel Prensa, emitió un comunicado anunciando que el sector estaba con altas posibilidades de recibir inversiones por 6.000 millones de dólares.
Llamó la atención a algunos analistas que le pusieran una cifra tan concreta a un comunicado que, básicamente, le daba la bienvenida al RIGI y le daba su apoyo como una medida en la dirección correcta.
“Va a venir una celulosa y se la están disputando entre Misiones y Corrientes”
“La industria forestal puede atraer inversiones por más de 6 mil millones de dólares que producen bioproductos de alta demanda local y global y crear así miles de empleos”, señaló ese comunicado, que se divulgó la tarde del viernes 28 de junio. No es habitual que esos documentos incluyan una cifra tan específica cuando se habla de pontenciales inversiones.
El escrito se divulgó ampliamente apenas horas después de que la Cámara de Diputados, en una sesión que arrancó el jueves a la noche y terminó en la madrugada del viernes, aprobara finalmente la Ley Bases que incluía el régimen de grandes inversiones.
Unos días después se produjo una curiosa visita a las oficinas de Arauco Argentina en Olivos (cerquita de la Quinta Presidencial). El ministro de Economía de la provincia, Adolfo Safrán, junto al vicegobernador Lucas Romero Spinelli, se reunieron con los directivos de Arauco Argentina, encabezados por Pablo Ruival. También estuvo Federico Fachinello, el titular de Industria.
Un encuentro únicamente con Fachinello, podría haber sido interpretado como un visita protocolar o de cortesía, pero la presencia del funcionario más importante de la administración de Passalacqua (Safrán) que también maneja la ATM, y el peso político de la presencia de Romero Spinelli, despertó especulaciones. Ante la consulta de Plan B, los directivos de Arauco Argentina explicaron que simplemente fue un encuentro para tratar “temas de trabajo”.
Lo cierto es que las relaciones entre la empresa más importante de Misiones, la mayor empleadora (más de 4.000 directos y otros tantos indirectos), la que posee 255.000 hectáreas de bosques implantados y nativos; y la principal exportadora de la provincia, pasan por el mejor momento. No siempre fue así.
Arauco Argentina supo tener relaciones tortuosas con la Renovación, por ejemplo, cuando le impusieron Ingresos Brutos a las exportaciones (fue la única provincia que lo hacía) o cuando se sancionó la Ley de Insalubridad para el sector.
También cuando la Renovación de Maurice Closs abrazó al kirchnerismo que denostó al sector, sobre todo a partir del conflicto con Botnia, que se considera en el ámbito forestal, fue responsable de perder casi dos décadas en el desarrollo y llegada de inversiones al sector. Botnia hundió el desarrollo argentino tanto como catapultó a Chile, Uruguay, Brasil y hasta Paraguay en este rubro.
Peor ahora las relaciones Arauco-Misiones son cada vez mejores. Incluso Pablo Ruival y los principales gerentes industriales fueron invitados a la Legislatura para presentar el libro “Manuel de Técnicas para Caminos Forestales”, que también es un aporte para el sector. Fue el 13 de mayo pasado y los recibió Oscar Herrera Ahuad, quien los acompañó para la presentación.
El número 1 de Arauco Argentina en la Legislatura, territorio de Carlos Rovira, sencillamente impensado hace unos años.
Para algunos expertos en el sector, Arauco Argentina podría invertir en una nueva planta de papel, integrando la pasta celulósica que produce en Esperanza. Pero hasta ahora son todas especulaciones y en la empresa jamás comentan las inversiones que siempre tienen en carpeta.
“Nosotros siempre competimos con otros países para lograr las inversiones del grupo”, explicó a Plan B, Pablo Ruival. Arauco ahora está contruyendo una gran planta de pasta celulósica en Brasil.
Central Puerto, también interesado
Otro jugador importante que no hay que descartar es Central Puerto, una empresa que controla buena parte de la generación eléctrica y tiene entre sus accionistas a los ex dueños de cervecería Quilmes y a los dueños del Banco de Galicia, entre otros. Como se sabe, CEPU2 (como se la conoce en la jerga bursátil) compró casi 100.000 hectáreas de pino y “euca” en Entre Ríos y Corrientes.
Primero a la chilena Masisa en diciembre de 2022 y en mayo siguiente a EVASA (el fondo de inversión de la universidad de Harvard).
¿Qué va a hacer CEPU2 con tantos bosques?
En el informe anual del 2023 del directorio de Central Puerto a los accionistas, al que accedió Plan B, se explica que el grupo ahora “analiza” la industrialización de toda esa materia prima. La empresa ya es el mayor productor forestal de la Argentina de capitales nacionales y tiene una capacidad para obtener fondeo del mercado, cuando la Argentina levante el cepo, que pocos pueden igualar.
Corrientes, va por más
Mientras tanto, del otro lado del arroyo Chimiray, el gobernador Gustavo Valdés era uno de los más interesados en el RIGI, tras inaugurar oficialmente el 22 de abril, en una gran ceremonia con bombos y platillos, la planta de ACON Timber, el mayor aserradero del país. Justamente ACON Timber destronó a Arauco Argentina como el mayor aserradero de la Argentina, es una inversión que podría ascender a 300 millones de dólares y considerada una de las más grandes de la historia de la vecina provincia.
Valdés en aquella ceremonia dijo que tenían en carpeta el tren entre Virasoro e Ituzaingó, cuyo puerto está casi listo y será el más importante de la región.
El gobernador correntino por estas semanas atraviesa el temblor por la desaparición del chico Loan, así como su colega misionero, Hugo Passalacqua, atravesó las turbulencias por las protestas de los policías y docentes un mes antes. Pero ambos siguen trabajando para conseguir esa gran inversión con el RIGI “bajo el brazo”.
Según un informe que divulgó la Fundación Mediterránea la semana pasada, Misiones y Corrientes integran el grupo de 13 provincias con posibilidades de inversión a partir de este régimen.
El sector, de todas formas, no está catalogado por el Ieral (el instituto de estudios económicos de la Mediterránea) como el de “más alta” probabilidad sino en el segundo pelotón con posibilidades “medianas”. Dato: no se incluye a Entre Ríos como posible receptora de una inversión-RIGI en forestoindustria, ni en ningún otro rubro.
¿Por qué posibilidades medianas y no altas?
En el sector, si es por condiciones, materia prima y potencial, las posibilidades son catalogadas de “altísimas”. Pero lo que siempre compensa todas esas condiciones, es el contexto político y la inestabilidad macro de la Argentina.
Esto es así porque durante años, el sector forestoindustrial fue la gran promesa a la que siempre le faltó “cinco para le peso” para concretar esas grandes inversiones. Fue justamente a la espera de esos proyectos industriales que se plantaron más de 1 millón de hectáreas de pino y eucaliptus en los últimos 30 años.
Como se sabe, hoy se cortan y se mandan a China e India los rollizos “pelados” sin mayor valor agregado, como triste testimonio de esas promesas incumplidas.
“Los países de la región han crecido y desarrollado enormemente la foresto industria, especialmente en Brasil, Chile y Uruguay, lo cual hace que al día de hoy el 40 % de la producción mundial de pastas celulósicas esté localizado en América del Sur, con proyección de crecimiento por las inversiones previstas. Ya hay consultas concretas sobre las posibilidades de inversiones en Argentina, ya que son conocidas sus ventajas comparativas para el crecimiento forestal y el potencial industrial que han logrado los países vecinos”, explicó CONFIAR en aquel comunicado el mismo día que se sancionó el RIGI y la Ley Bases.
Desde entonces, empezó una carrera contrareloj donde Misiones y Corrientes conversan con los grandes inversores e industriales del sector para decir: qué esa inversión venga a nuestro territorio, que genere empleo y desarrollo.
El tiempo dirá si esta vez se concreta y para que lado del arroyo Chimiray va esa primera gran inversión para lo cual el sector viene trabajando hace muchos años.
Plan B/ 1°-8-2024