Los misioneros de JxC votaron en contra.

Opinión: En el fracaso del Presupuesto, Juntos x el Cambio quedó más desdibujado que el oficialismo

La Argentina tiene que pagarle al Fondo Monetario Internacional la semana próxima 1.800 millones de dólares que no tiene. O se los tiene que sacar a las pocas divisas con las que mantiene funcionando su economía, con muchas restricciones.

Desde las dificultades que tiene una fábrica para traer insumos, a la imposibilidad que tiene un argentino de financiar en cuotas un viaje a Brasil. Todo pasa por la escasez de dólares, para lo cual es fundamental acordar con el FMI y luego con el Club de Paris (nos espera hasta marzo), y después de eso, tratar de encontrar un rumbo consistente en la economía.

En ese marco, el paso de comedia que le dieron a todos los argentinos oficialistas y opositores en la madrugada del jueves, tras un debate de 20 horas y el rechazo al Presupuesto 2022 en la Cámara de Diputados deja una vez mal parada a la dirigencia política de cara a la sociedad, en un momento crítico para que el país encuentre un rumbo. Algún tipo de rumbo. El principio de un camino o al menos el intento. Algo.

Uno de los puntos más importantes del Presupuesto es el de mostrar, justamente, a una dirigencia política unida y responsable para encarar los graves problemas de financiamiento que tiene la Argentina y que le pegan de alguna manera a cada uno de los argentinos. Acá ya no se trata solamente de cumplir con los acreedores sino de encontrar cierta normalidad para nosotros, para los compatriotas.

En este nuevo fracaso por ponerse de acuerdo en cuestiones fundamentales, se pueden repartir culpas para ambos lados. El kirchnerismo por su posición aparentemente intransigente cuando sabía que el Presupuesto no pasaba. “Votemos por sí o por no”, desafió Máximo Kirchner, sabiendo que iba a ser “no”.

Irresponsabilidad

Pero más irresponsble parece la postura de Juntos por el Cambio que rechazó el Presupuesto con argumentos muy débiles, como que tenía los números dibujados. ¿Qué presupuesto de la Argentina no tuvo los números dibujados? Se trata de una estimación, siempre optimista, de una conducción económica del Gobierno de turno. Este Presupuesto hasta tenía la honestidad de avisar que la inflación el año próximo sería más alta que la de 2021.

La cuestión de fondo en el tema del Presupuesto es si se van a juntar o no, oficialistas y opositores para solucionar el problema que la Argentina tiene con el Fondo, con el Club de Paris y con el resto de los acreedores. Porque si bien se renegoció o se pateó para adelante el problema de los bonistas, el tiempo corre y volverá a resurgir.

Además, al rechazar el Presupuesto 2022 el espacio de Juntos por el Cambio le sacó el cuerpo a un problema que, casi con exclusividad, generó esa fuerza política durante el gobierno de Mauricio Macri, con un polémico endeudamiento récord en un tiempo muy corto (también récord), primero emitiendo bonos e invitando a todas las provincias a hacer lo mismo (Misiones dijo: yo a esta no me subo, porque ya se como termina) y luego acudiendo al FMI dos veces.

Una vez a pedir 55.000 millones de dólares en un stand by a tres años. Otra, semanas después, a pedir que le dieran toda la plata junta para dilapidarla en unos pocos meses, financiando una descomunal fuga de divisas, cuando debería haber instaurado controles de capitales (cepo) para detener esa sangría. Lo terminó haciendo tarde y hoy estamos pagando esas consecuencias.

Sólo los razonamientos de grieta, del River-Boca en el que se transformó la política salva a Macri de tener que asumir plenamente las culpas por ese manejo irresponsable que nos hipotecó por años. Como el bono en dólares a 100 años.

¿Quién endeudaría a su familia en dólares a 100 años? El verdadero triunfo es si un gobierno logra ser confiable y puede tomar deuda a 100 años o a 10, al menos, en pesos y a tasas fijas. Esa es una prueba de éxito.

Los misioneros de Juntos por el Cambio

Un párrafo final para los representantes misioneros de Juntos por el Cambio en el Congreso Nacional. Alfredo Schiavoni y los recientes ganadores el 14/11 Martin Arjol y Florencia Klipauka. Al final le dieron la razón al jefe de la Renovación, Carlos Rovira y votaron por los intereses y los mandatos de las conducciones de sus fuerzas políticas en Buenos Aires.

Digan lo que digan, votaron por obediencia partidaria a una fuerza que ya mira con ganas el 2023. El 133 a 121 es demasiado contundente y uniforme, como para que quieran esgrimir argumentos propios y locales para su voto negativo al Presupuesto 2022.

Sin dudas, votar el Presupuesto le convenía a Misiones, por las obras públicas que había para la tierra colorada y un nuevo intento por instaurar la zona aduanera especial o por obtener algún tipo de beneficio impositivo al menos, en el toma y daca de las negociaciones políticas (te apruebo la zona, y luego si te la veto, te doy algo a cambio).

La buena noticia es que lo del Presupuesto fue apenas un primer round y ya vendrán otros donde tendrán que sentarse de vuelta los de “River” y los de “Boca” y ponerse de acuerdo en cosas básicas para sacar el país adelante. Veremos qué camino elijen, entonces.

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