El dólar “blue” volvió a la tapa de todos los diarios por el salto de 15 pesos que tuvo en las últimas dos semanas, hasta alcanzar los 183 pesos para la compra el día de ayer.
Sin embargo, hay que poner las cosas en contexto. En octubre del año pasado el dólar “blue” llegó a tocar los 195 pesos y a valores reales de hoy, para que el dólar “blue” llegara a ese máximo real (es decir, en términos de poder adquisitvo), debería valer $270, un 48% más de lo que vale hoy, según calculo el portal iProfesional.
En la city porteña nadie está viendo una corrida del dólar “blue” o un proceso persistente de subas diarias que lleven al billete verde a ese máximo en el corto plazo.
En lo que todos los analistas están coincidiendo es en que el dólar estaba muy quieto, “pisado” por el Gobierno Nacional a través de la intervención en el mercado de bonos de la Bolsa para controlar las cotizaciones del dólar Contado con Liquidación (CCL) y Dólar MEP o Dólar Bolsa, que son las cotizaciones libres que luego influyen en la cotización del dólar “blue”.
Los problemas económicos de fondo
Para poner en contexto que pasa con el dólar, hay que tener en cuenta que en rigor, de lo que estamos hablando es del valor del peso argentino (contra la moneda norteamericana). La Argentina no controla el valor del dólar, sino que manipula o regula o intenta intervenir -de distintas formas- en el valor de su propia moneda, expresada en su relación contra la moneda norteamericana.
La Argentina, coinciden todos los analistas, está muy lejos de solucionar sus problemas económicos y no está en los comienzos de un ciclo de recuperación económica sostenida. Sino que apenas transita un rebote de su economía, que el año pasado tuvo una caída del PBI de 9,9% (récord) por la pandemia y los problemas que ya venía arrastrando.
A esto se suma la crisis cambiaria que tiene la Argentina, con un Banco Central que prácticamente se quedó sin dólares líquidos en sus reservas y sin crédito internacional de ningún tipo (ni de inversores, a través de colocación de bonos o créditos de bancos, ni de organismos como el FMI).
La Argentina, además, está negociando acuerdos con el FMI o el Club de París que apenas prometen “sacarle la bota de encima” y no entrar en default, no el ingreso de nuevas divisas. Por eso el cepo, que se ajustó un poco más hace unos días.
Los únicos dólares que le ingresan a la Argentina genuinos son los de las exportaciones. En este contexto, es normal que el peso argentino se devalúe en su relación con el dólar libre o dólar “blue”.
Con las elecciones de las PASO por delante, esto genera incertidumbre en el mercado y la gente quiere cubrirse. Como sucede en la Argentina antes de cada elección. Además, hay incertidumbre respecto a cómo va a ser el final del mandato de el ya débil Alberto Fernández si tiene un resultado muy negativo en las urnas.
El dólar quedó barato
Pero además, hay que tener en cuenta que el dólar “blue” en la Argentina quedó barato. Así como en octubre cuando rozó los 200 pesos era ya una cotización muy cara contra los productos y servicios de la economía local, hace un par de meses cuando cotizaba a 140 pesos (y todos los productos y servicios estaban cada día más caros) había alcanzado un valor muy bajo.
El mercado también está corrigiendo esa cotización que quedó muy atrasada.
“Lo normal es que empiece a subir y se den oscilaciones“, consideró el director ejecutivo de la fundación Libertad y Progreso, Aldo Abram. “Hay elecciones hacia adelante y generan incertidumbre. Además, hay un frente abierto complicado con el Fondo Monetario Internacional”, manifestó en comentarios a iProfesional.
“¿Por qué la gente compra dólares antes de las elecciones? Es una combinación de dos factores. Por un lado, se intuye que va a pasar algo distinto de lo que pasó hasta ahora. Y por el otro, eso se alimenta con que el Gobierno, para llegar mejor a las elecciones, pisa todo, incluido el dólar. Entonces, esa doble señal te da la alerta de que ‘ahora está barato y mañana va a estar más caro’”, completó el economista Camilo Tiscornia, titular de C&T Asesores, en declaraciones al diario La Nación.