Los pequeños productores de yerba de esta provincia continúan con su protesta en las rutas en reclamo por un mejor precio por la hoja verde y este fin de semana realizaron cortes parciales en varios puntos de la provincia, incluido el acceso a las Cataratas del Iguazú.
Los yerbateros sostienen que con la desregulación de la actividad, aplicada por el presidente Javier Milei con el decreto 70/23, y que le sacó al Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) la potestad para fijar precios, cobran precios que no son rentables.
Si bien no hicieron cortes totales y siempre dejaron circular el tránsito, los productores apostados al costado de la calzada o cortando la mitad de la ruta, se concentraron en Iguazú, San Vicente, Andresito, San Pedro y Jardín América, San José, entre otros puntos, aprovechando el intenso movimiento turístico en Misiones por el fin de semana largo de Carnaval.
La protesta crece en adhesiones y desde este domingo empezó la que podría ser la mayor concentración de tractores de los yerbateros desde que arrancó esta protesta, a principios de diciembre pasado.
Desde San Vicente, Jardín América, Oberá, Andresito, San Pedro y otros lugares los “colonos” cargaron los tractores en camiones y empezaron a concentrarse en el cruce de San José, donde se juntan las rutas nacional 14 de acceso a la provincia, con la ruta provincial 105. Desde ese punto, distante a 50 kilómetros de la capital provincial, se llega a Posadas en 40 o 50 minutos en automóvil.
Las fotos y los videos que comparten los productores en los grupos de Whatsapp muestran camiones que cargan las pesadas máquinas y que son un símbolo de la protesta yerbatera y de una de las mayores conquistas agrarias en la historia de Misiones.
En 2001 un gran tractorazo que marchó desde el interior a Posadas, y se plantó con las vetustas máquinas frente a La Rosadita, la Casa de Gobierno provincial, logró visibilizar un reclamo por los precios y presionar para la sanción de la Ley 25.564 que dio origen al INYM.
Ese organismo regulaba los precios de la materia prima -tanto la hoja verde como la yerba canchada- dos veces al año desde 2002 hasta diciembre del 2023, cuando el DNU 70/23 eliminó las facultades regulatorias del INYM. Hoy los productores reclaman que se devuelvan las potestades regulatorias al INYM, y sobre todo, que las industrias paguen por la hoja verde un mínimo de 420 pesos, que es el valor que establecieron los directores por la producción del organismo yerbatero, y que incluye los costos y la ganancia del productor de un 30%.
Hoy las industrias están pagando unos 200 o 220 pesos, un valor con el que los productores no consiguen cubrir los costos. Ese valor fue bajando a lo largo del 2024 por la sobreoferta de materia prima. Pero desde hace dos meses, se considera un precio tan bajo que muy pocos productores cortaron hoja verde para llevarla a los secaderos.
“Nosotros estamos acá desde la mañana [por ayer], ahora llegaron de San Pedro y van a llegar de Andresito, vamos a ver qué respuesta tenemos, realizaremos una asamblea y vamos a resolver qué hacer”, explicó a LA NACION Javier Otto, uno de los referentes de la protesta. Con la concentración de los productores en la rotonda de San José, se realizará una asamblea para analizar los pasos a seguir.
Una clave de la protesta de los productores es que no hay a quien reclamarle por el precio de la yerba mate. ¿Por qué? Porque ya no existe una mesa donde se puedan sentar con los industriales, ya que el INYM dejó de ser un ámbito para discutir el precio.
Y, por otra parte, el gobierno provincial hasta ahora solo ha realizado reuniones con los productores donde lo único que les prometieron fue canalizar sus pedidos al gobierno nacional a cambio de que levantaran los cortes de ruta. Este domingo en un posteo en su cuenta de twitter, el gobernador Hugo Passalsacqua sugirió que la desregulación yerbatera ya es cosa juzgada y no volverá al menos con el gobierno de Javier Milei. “Tenemos que buscar soluciones por afuera” de la regulación, dijo Passalacqua, junto al ministro del Agro, Facundo López Sartori, y el ministro de Hacienda, Adolfo Safrán.
Passalacqua fue a Buenos Aires varias veces el año pasado a reclamarle al secretario de Agricultura, al ministro de Economía y también al jefe de Gabinete que restablezcan las facultades regulatorias del INYM y que designen un presidente.
También le envió una carta al ministro Luis Caputo en la que le explicó que el “libre mercado no funcionará” en el sector yerbatero al que calificó de un “oligopsonio” donde unas pocas industrias no compiten por comprar hoja verde sino que se ponen de acuerdo, fijan el precio y se aprovechan de una oferta caracterizada por muchos vendedores con poca capacidad de ponerse de acuerdo y establecer una posición común.
En 2001 y 2002, los productores yerbateros, quienes admiten que les cuesta organizarse y están muy divididos, lograron ponerse de acuerdo gracias al bajísimo precio que se pagaba por la hoja verde y una época de “vacas flacas” en las chacras misioneras. Ahora en este 2025 la película, salvando las distancias, se parece mucho y amenaza con crecer hasta emular aquél histórico tractorazo.
Plan B/ La Nación / 4-3-2025
