YPF despachó 34% más pero no alcanza.

Suba del dólar "blue" agravó escasez de gasoil y hacen cola desde la noche anterior para "cargar algo"

El drama de la escasez de gasoil para levantar la cosecha de yerba mate y otras producciones de esta región volvió a recrudecer en la provincia de Misiones en las últimas semanas.

Muchos camiones tienen que hacer cola para cargar un poco de combustible (no llenan el tanque porque hay racionamiento), debido a que las estaciones empiezan a despachar a las 6 de la mañana y normalmente dos horas después ya no queda una gota.

“Nosotros tenemos un cupo de 10.000 litros por día y por eso están haciendo cola esos camiones, a las 6 empezamos a despachar y no dura nada”, explicó a Plan B, un playero de la Axion que está en el acceso a la ciudad de Oberá -epicentro de la actividad yerbatera y tealera- sobre la ruta nacional 14.

Desde YPF destacan que a la provincia de Misiones se despacharon 34% por ciento más de gasoil en julio, comparado con el mismo mes del 2019 en la pre pandemia. Pero la fuerte presión que ejerce la demanda de paraguayos y brasileños hace que cualquier aumento de la oferta sea insuficiente.

Incluso YPF estableció un cupo extra de 1 millón de litros de gasoil para productores yerbateros, en plena zafra, que se está cumpliendo pero que no alcanza para paliar la escasez y los constantes racionamientos.

A todo esto, se suma la devaluación del dólar “blue” que abarató drásticamente el costo del combustible para los que vienen con guaraníes o reales brasileños. 

Como muestra basta un ejemplo: el costo del litro de diésel Premium, que YPF implementó como obligatorio para chapas extranjeras, está en 240 pesos. Ese costo pasó de ser 1,20 dólares a apenas 70 centavos de dólar en el peor momento de la corrida cambiaria hace unos días (dólar a 340 pesos). Generando más presión fronteriza.

“Lo que mandes a Misiones se vende, si mandas el doble, también se va a vender y nunca va a ser suficiente”, comentaron a Plan B desde una petrolera.

Colas y demoras

Algunos productores consultados por este diario explican que tienen que perder mucho tiempo haciendo colas y además no les cargan lo suficiente. Apenas 100 litros si van con camioneta o 300 litros si van con un camión grande que puede admitir mucho más.

Si llevan bidones en muchas estaciones se niegan a cargarles esas reservas extra.

Un productor de San Vicente llegó a perder una parte de la cosecha de hoja verde porque cortó la yerba de la planta, pero después no podía mover un camión para que trasladara esa materia prima a los secaderos.

“A principios de junio cortamos yerba a 100 kilómetros de donde tenemos el secadero y llegado el momento, tras un par de viajes, me quedé sin combustible. La gente no sabía eso y siguió cortando yerba y no pudimos levantar esa hoja verde cosechada, se perdió porque estuvo casi 3 días en bolsos y se marchitó”, explicó el productor y dirigente agrario, Carlos Ortt.

La hoja verde de yerba mate es una planta que se hay que entregarla en el secadero y comenzar su proceso de deshidratación menos de 24 horas después de cortarla de la planta, sino comienza a deteriorarse.

En el caso de Ortt, tuvo que hacer acuerdos con secaderos que quedaran más cerca de los lugares donde están los yerbales y resignar abastecer su propias instalaciones porque están situadas más lejos.

Zafra yerbatera

El racionamiento y los constantes faltantes se producen en un momento donde la cosecha zafra yerbatera está en su momento de mayor actividad. 

Según datos del INYM, en junio se cosecharon 141 millones de kilos de hoja verde, el segundo máximo mensual de los últimos cinco años. 

El ritmo sigue a full, ya que la cosecha se demoró un mes por la sequía y ahora los productores quieren recuperar el tiempo perdido, pero chocan con la escasez de gasoil, que ralentiza el trabajo junto con la desesperante falta de mano de obra.

“Enfrentamos estos dos dramas, la falta de mano de obra porque nadie quiere perder los planes y la falta de combustible”, señaló Cristian Klingbeil.

“La semana pasada me reuní con gente de YPF y me dijeron que ya están despachando el cupo del millón de litros de gasoil, sin embargo a mi también me llegaron quejas de los productores”, explicó a Plan B, el gobernador Oscar Herrera Ahuad.

Además del cupo extra de 1 millón de litros de YPF, de los cuales la mitad se iban a despachar por estaciones de servicio y la otra mitad por la red de YPF Agro (a granel). Se sumaba un cupo extra de 300.000 litros que iba a aportar Shell.

La devaluación presiona la demanda

En el caso de la cosecha de yerba mate, se utilizan muchos viejos camiones medianos para levantar la cosecha de hoja verde y llevarla en pochadas a los secaderos, a distancias que pueden variar entre 20 a 100 kilómetros, enfrentan enormes restricciones para acceder al gasoil.

“Estamos muy complicados con el tema del combustible, en San Vicente tenemos dos estaciones de servicio YPF y hace seis días que no llega el gasoil común, solamente una carga del premium, pero hay una cola de cuarenta camiones continuamente, así como llega el combustible ya se acaba rápido”, explicó a Plan B, Fabial Laban, pequeño productor de San Vicente.

“Lo que falta más es el gasoil común que usan los camiones. El Infinia o premium hay un poco más, se está consiguiente pero esa parte se torna muy caro, lo vamos piloteando con lo que conseguimos, la parte agropecuaria sufre las consecuencias, el sector yerbatero se la está rebuscando como puede”, explicó Victor Chamula, productor de la zona de Andresito, otro de los grandes epicentros yerbateros de la provincia.


“En la cosecha la escasez de combustible es un problema, pero más lo es la falta de mano de obra”, explicó este productor yerbatero y ganadero.

FIN

Loading