Los empresarios armadores areneros de Posadas expresaron su malestar con el Director de Minas de la provincia por una serie de reclamos que vienen elevando a esa dependencia y no reciben respuesta satisfactoria.
Por ese motivo estos empresarios -prácticamente los únicos operadores de barcos fluviales que tienen algún tipo de actividad comercial en un río Paraná poblado por barcos paraguayos-, hicieron trascender públicamente sendas cartas elevadas a el geólogo Fernando Crivello, el funcionario encargado de esta área, quien depende del Ministerio de Industria que conduce Nicolás Trevisan.
Las cartas son del 29 de junio pasado y otra del 29 de julio, solicitando información sobre las peticiones realizadas en la primera misiva. Lleva la firma de una decena de armadores (ver abajo).
Fundamentalmente, los empresarios areneros reclaman que los aportes que tienen que realizar obligatoriamente al abonar la guia minera con la que despachan cada camión de arena que extraen del río, tengan algún destino que promueva la actividad.
Como arreglar caminos con los que se llega a los apostaderos navales ubicados en Nemesio Parma o que se brinden todos los servicios básicos, como luz, agua, internet, cada día más necesarios para realizar cualquier tipo de actividad comercial.
Incluso hay un problema ahora que la intención de esta dependencia es digitalizar la Guía Minera, lo cual necesariamente requerirá que cada camionero complete este formulario antes de salir con la carga, utilizando un teléfono que debe tener conectividad plena y determinadas características técnicas.
“No todos los camioneros tienen un smartphone con todas las prestaciones y muchas veces no hay conexión de datos e internet al lado del río”, explicó a Plan B, uno de estos armadores fluviales (el armador es el empresario que opera el barco).
Una actividad que beneficia al río
Los empresarios también sostienen en estas misivas enviadas al funcionario que vela por la actividad arenera, que se contemple los fuertes costos que enfrenta un actividad y se implementen medidas para paliar un poco esta situación.
Entre los altos costos que enfrenta la actividad arenera están los valores de las chapas navales y otros insumos que siguen los vaivenes del dólar “blue” o sufren restricciones a importaciones.
Además, realizan una actividad que favorece la navegabilidad del río Paraná, que es extraer arena que de otra forma obstruiría el lecho del río frente a las costas posadeñas o río abajo.
Hay que tener en cuenta que el Estado Nacional concesionó durante décadas el dragado de la Hidrovía a la empresa holandesa Jan de Nul justamente para que mantenga la navegabilidad y drague el río a cambio del cobro de cuantiosos peajes a los barcos cerealeros, sobre todo, que parten de los puertos ubidados en las costas santafecinas.
Los areneros de Posadas piden que se contemple este aporte que hacen a la navegabilidad del río y se los reconozca con algún tipo de medidas. Por ejemplo, proponen crear un fondo crediticio para la construcción naval con aporte de los fondos de las guías mineras.
También proponen poder utilizar los saldos a favor que tienen en retenciones de Ingresos Brutos con la ex DGR, para el pago de impuestos como Sellos o Inmobiliario.


