La mirada de Plan B.

El insólito boicot oficial a una feria que podría proyectar el potencial de Misiones al mundo

Misiones es una provincia que tiene algunas atracciones que en Plan B podríamos llamar “de categoría mundial”.

¿Qué quiere decir? Que pueden concitar la atención de gente de cualquier parte del mundo, un finlandés, un chino o un neoyorkino, tranquilamente, y sin que nadie se sorprenda.

La más obvia es las Cataratas del Iguazú, para la cual los misioneros no tuvieron que hacer nada. Fue el puro azar de la Madre Naturaleza.

Es más, hace poco el multimillonario de Dubai, Ali Albwardy, dijo: “A Iguazú le falta”, poniendo palabras foráneas a lo que todos piensan localmente.

También se podría citar de “categoría mundial” la biodiversidad y la selva misionera, y aquí si hay que mencionar el esfuerzo y el sacrificio de miles y miles de misioneros por cuidar ese patrimonio.

La música y la poesía de Ramón Ayala también entraría en esa categoría, la de un patrimonio cultural de escala mundial. No sería una locura escuchar la melodía de “El Cosechero”, en el David Geffen Hall, donde toca la Filarmónica de Nueva York.

whatsapp image 2024 04 26 at 16.27.47
El gobernador de Itapúa, Francisco Javier Pereira Rieve, quedó sólo, ya que Passalacqua pegó el faltazo. Cuando viene un mandatario de otra provincia u otro país (Brasil o Paraguay) el protocolo manda que lo recibe su par, el gobernador. ¿No puede? Manda al vice. ¿Tampoco puede? Manda un ministro o un secretario o un subsecretario. En la UNaM no hubo un sólo funcionario. Al paraguayo lo dejaron solo.

Las vibración intensa y la potencia de la poesía de ese verdadero genio que nos dejó hace muy poco, podrían abrir por sí solas, las puertas de cualquier escenario de elite.

Por cierto, si bien la obra de Ayala goza ya de amplio reconocimiento, este crecerá con el mero transcurrir del tiempo, como pasó con pintores como Rembrandt o Van Gogh.

Ya en Misiones asistimos, cuando su muerte, al desfile de manifestaciones un tanto sobreactuadas por parte de muchos que lo ignoraron -o casi- en sus últimos años. Pero bueno, así son las mezquindades humanas. Es más fácil alabar y admirar a alguien que ya no está, que a uno vivo.

Y hablando de mezquindades, probablemente con algo de eso y una miopía digna de la política argentina, el Gobierno de Misiones hoy concretó otro magnifico boicot a una muestra que también podría darle a la tierra colorada una proyección internacional interesante: La Feria Forestal.

Un evento con enorme potencial

Nacida hace casi 20 años, esta muestra a cielo abierto de las sofisticadas maquinarias, los avances tecnológicos, la ciencia y los negocios forestales, podría haberse convertido tranquilamente en un faro que ilumine a Misiones y a uno de los sectores donde tiene una competitividad de categoría mundial, porque en ningún otro lugar del mundo los pinos o eucaliptus crecen tan rápido y bien como aquí.

Pero el Gobierno, que impulsó y alentó al menos las primeras 10 ediciones de la Feria Forestal y la “supo ver” (parafraseando a Milei), al punto que mandó a construir los enormes pabellones del Centro del Conocimiento fundamentalmente para albergar a esta muestra, desde hace un par de años le retiró todo su apoyo.

Del Centro del Conocimiento tuvo que migrar obligadamente al Parque Tecnológico junto a la Biofábrica y hoy la Feria es un pálido reflejo de lo que fue en algún momento o de lo que pudo haber sido si se aplicaba en mejorar año a año.

Decimos esto porque también su “achicamiento” está vinculada a la crisis argentina y probablemente a lo que en tenis se llamarían “errores no forzados” de los organizadores.

Pero el retiro del apoyo oficial es imposible de ocultar y hoy tuvo su máxima expresión en el plantón que le dio el gobernador Hugo Passalacqua a su par de Itapúa, Javier Franciso Pereira Rieve.

Esta mañana se realizó la inauguración oficial de la 16° Feria Forestal en una colmada Aula Magna de la Facultad de Ciencias Económicas de la UNaM y ante la sorpresa de los menos avisados: no fue ni el gobernador ni ninguna otra autoridad.

Este comerciante encarnaceno, gobernador de la provincia que está al otro lado del río, ocultó educadamente la sorpresa que le causó no ver a nadie que represente al gobierno.

No sólo faltó Passalacqua, tampoco estuvo el vicegobernador, ni ningún ministro, ni el subsecretario Forestal ni tampoco el titular del Infopro. Tampoco fue la dueña de casa, la Decana e ingeniera forestal Alicia Bohrens, una forestal pura.

“Manda saludos y se disculpa porque no pudo venir por cuestiones de agenda”, dijo la locutora del evento, ante un auditorio de la Facultad de Ciencias Económicas colmado.

Ya se sabe, en Misiones cuando la máxima autoridad (Carlos Rovira) ordena bajarle el pulgar a algo, nadie se atreve ni a asomar.

Estuvo sí, Guillermo Fachinello, a quien también le habían hecho llegar el mensaje de que verían con buenos ojos que pegara el faltazo. Pero el titular de APICOFOM y la CEM igual estuvo (bien por el).

Pero semejantes ausencias con tamaña visita fue un verdadero papelón, teniendo en cuenta que lo dejaron solo a Pereira Rieve.

Quien igual aprovechó para recordar que su región está cada vez más interesada en la producción forestal, con la mira puesta en la enorme planta de pasta celulósica (PARACEL) que está construyendo el empresario Blas Zapag, en el departemento de Concepción.

“Va a ser una de las más grandes del mundo”, dijo Pereira Rieve a Plan B, sin dejar de traslucir una nota de orgullo en esa sentencia.

Paraguay, el país que no tenía forestaciones, en poco más va a terminar inaugurando una inversión de 2.000 o 3.000 millones de dólares, mientras Misiones, con todo a su favor para tener 2 o 3 industrias como esa, ya lleva 42 años sin inaugurar una fábrica semejante. Cómo sí lo hicieron en las últimas dos décadas: Chile, Uruguay y Brasil.

No cuesta imaginar que en algún momento, no tan lejano, un versión aumentada y mejorada de la Feria Forestal se va a realizar del otro lado del río, mientras la Argentina (y Misiones) verá cómo dejó pasar otra oportunidad.

Plan B/ 26-4-2024

 

Loading