Por Martín Boerr
A los 87 años Oscar Vardé sigue activo como hace más de seis décadas, cuando comenzó su derrotero por el mundo de la energía y las represas, primero del Sur del país y luego en Yacyretá, entre muchos otros lugares.
Vardé tiene un currículum que necesita de varias páginas, aún en su versión abreviada. Es presidente honorario en la Academia Nacional de Ingeniería. Actualmente está involucrado en las represas Néstor Kirchner y Cepernic de Santa Cruz y también en Aña Cuá, como integrante de un panel de expertos que auditan la obra.
Tras el apagón del miércoles, que afectó a unos 20 millones de argentinos, lo invitamos a reflexionar sobre los problemas que acarrea nuestro país con la energía, un talón de Aquiles permanente, las represas y la falta de un gasoducto que llegue a Misiones.
También -por supuesto- le pedimos que comentara sobre el tema de los proyectos de represas Corpus, Garabí-Panambí y otros grandes planes que involucran a la región y que hoy parecen bastante relegados, mientras a nivel país se discute sobre Vaca Muerta, el Gasoducto Néstor Kirchner (otro que no llegará a Misiones) o energías alternativas.
“Yo creo que hoy cualquier misionero con algo de criterio no puede atacar más Yacyretá con todo lo que se ha beneficiado la región”, reflexiona Vardé, al comentar sobre el sentimiento anti-represa que imperó en Misiones a comienzos de los 90 y que hoy no parece ser el mismo.
Consultado sobre si hay que reflotar el debate sobre la eventual construcción de Corpus y Garabí, Vardé no lo duda: “Absolutamente, es necesario y hay que debatir con información y despojado de ideologías o posiciones políticas, ver qué le conviene al país y a la provincia”.
“Trabajé en el proyecto de factibilidad de Corpus y sobre el río Uruguay, también en Garabí y Roncador (Panambí), en la década del 70 ya se hizo un inventario completo con la identificación de las 3 obras en el Uruguay, pero nunca se concretó, como tampoco se concretó la construcción de Corpus”, explica.
“Corpus o Garabí son obras de un enorme aporte, multipropósito y sobre todo, energético”, señala.
Las represas no están en agenda
“En mi opinión hay que reflotar la discusión sobre Corpus, sobre todo porque este tipo de energía hidroeléctrica además de ser renovable, limpia y libre de contaminación está agregando una cantidad de potencia enorme”, detalla.
Para hacer una comparación, Corpus tiene (en los papeles) una capacidad de generación mayor que Yacyretá, que es hoy la generadora más grande del país de cualquier tipo, y explica casi el 14% de la oferta de energía Argentina.
Pero además, Vardé asegura que la construcción de Corpus no generaría mucho impacto ambiental ni necesidad de relocalizar poblaciones como ocurrió con Yacyertá.
“Aquella era una represa de llanura, con una longitud de 60 kilómetros y un embalse de 1600 kilómetros cuadrados. Corpus no lo es”, define.
-¿Argentina necesita más represas?
-Sí, se necesitan y más aún si el pico de demanda a futuro se hace más imperante como es obvio, porque hay un crecimiento que se supone que debe existir en el desarrollo de un país. Lo que tiene de importante es que es energía firme (constante), porque el río Paraná tiene un caudal muy importante siempre.
–¿Misiones se beneficiaría de la construcción de Corpus como se benefició con Yacyretá?
-Con Yacyretá hubo muchas obras como la Avenida Costanera en Posadas y también en Encarnación. Yacyretá no solo benefició a la región por la energía, sino también en los puentes, caminos y protecciones. Pero en el caso de Corpus, depende de una decisión política, como también lo fue con Yacyretá. Porque en el caso de Yacyretá como entidad binacional aportó fondos para estas obras sin tener una obligación estatutaria o contractual para hacerlo. Las obras complementarias o de compensación siempre van a depender de la decisión política en el momento en que se haga la obra.
-¿Cree que la opinión pública en Misiones sobre las represas se formó con la peor parte de la película de Yacyretá y sin tener en cuenta el final de esa película, con las obras complementarias?
-Sí, claro. Yacyretá generó rechazos por lo que sucedió al principio de su construcción. Yo hoy creo que cualquier misionero con algo de criterio no puede atacar Yacyretá, más con todo lo que se ha beneficiado la provincia y la región. Las épocas cambian, también han avanzado los estudios de impactos ambientales y mitigaciones. En una época hablar de esto era una especie de tabú. Cualquier obra hidroeléctrica estaba atacada. A veces, sin tener un conocimiento previo de cual es la afectación. Muchas veces la culpa es de los que proyectan la obra que no comunican bien. Aña Cuá en cambio es un caso particular, es el aprovechamiento del brazo Aña Cuá que hoy está siendo evacuado por el vertedero, aportará energía constante que va a aumentar en 2200 Gigavatios hora lo de Yacyretá. Hoy diría que es la obra más rentable que se está haciendo en energía hidroeléctrica.
-¿Si se hace Corpus, la provincia sí o sí tiene que obtener algo porque pone el río, por decirlo de alguna manera?
-La mayoría de las obras hidroeléctricas están sobre un río y los ríos son provinciales, son las provincias las que tienen que generar órganos que controlan estas situaciones, las llamadas autoridades de Cuencas. Como la del Río Colorado, el Río Limay que reciben aportes de las hidroeléctricas. Las provincias deberían beneficiarse. Posadas es una muestra enorme del beneficio, como también lo es Encarnación.
-Pero la cuestión de las represas salió de la agenda y se discuten otras cuestiones. Gasoductos y energías alternativas...
-Nosotros en la Academia de Ingeniería tenemos un Instituto de Energía que ha estudiado exhaustivamente estos temas de las represas. Y es cierto, se dejó de hablar de represas y eso no ha sido beneficioso para la Argentina en los últimos años, se empezaron a promocionar energías complementarias como la eólica, la solar, que son útiles, pero no son energías sostenibles de pico, y necesitan potencia de base, no dan potencia de base. Algunas son interesantes, y otras no tanto y el asunto no me parece tan feliz.
-¿Y el proyecto de Corpus, en que estatus quedó?
-Hay un ente que sigue funcionando, este ente ahora está absorbido por la Entidad Binacional Yacyretá. A algunos de los que trabajan ahí los vi hace poco y me comentaron que hay una corriente positiva de reactivar los estudios. Hay estudios geológicos, de factibilidad, etc. Creo que hay una intención de reflotar el debate sobre la posibilidad de hacer la obra.
-¿En dónde quedaría emplazada?
-Está un poco aguas arriba del sitio en que se pensaba antes, en Pindo-í. Prácticamente alineado con la población con una altura menor a la original para disminuir el impacto. Hubo varias campañas de sondeos geotécnicos, geofísicos y geológicos.
-¿Paraguay que postura tiene?
-Ellos están a favor, obviamente. A ellos les viene muy bien ya sea porque aprovechan la energía o porque reciben el beneficio de la obra y aún compartiéndola, si se usa más del 50 por ciento de la energía, la Argentina le tiene que pagar a Paraguay.
-¿Es importante debatir sobre nuevas fuentes de energía en la Argentina?
-Sin energía no se puede hacer nada. Ni la inteligencia artificial, evidentemente cualquier recurso que uno tenga del tipo técnico o informático o de desarrollo si no tiene energía cómo hace la industria para crecer. La energía hidroeléctrica además, tiene la ventaja que es energía limpia. Frente al la transformiación que se busca en el mundo de bajar la contaminación y la huella de carbono.
-¿Qué piensa de que Misiones es la única provincia sin un sólo metro de gasoducto?
-Y a mi me parece que es muy importante, y no tener gas cuando están rodeados de gas, el gasoducto de Bolivia. Nosotros tenemos el problema que tenemos Vaca Muerta y no podemos trasladar y exportar ese gas por falta de infraestructura y puertos, es un hecho que ya señalamos hace más de 10 años. Misiones es una rica provincia tiene de todo, trabajé mucho allí y no sólo en Yacyretá, me parece una región muy interesante.
-¿Debería tener gas?
-Debería tenerlo, claro, pero se cortó la expansión de los gasoductos que fue un leitmotiv de YPF cuando se creó y Gas del Estado. Ustedes (los misioneros) pagaron las consecuencias de este cambio de estrategia. Ha habido falta de información en mi opinión, la comunicación es un elemento básico pero debe haber una buena calidad de información. Cuando se discuten estos temas estratégicos hay que despojarse de ideologías políticas o prejuicios y ver qué es mejor para la gente.
Plan B/ 2-3-2023
