A poco más de 60 días del intento de atentado, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner reapareció ayer públicamente en un acto en la localidad bonaerense de Pilar de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
A pocos días de la victoria de Lula da Silva en Brasil, Cristina dejó de lado las críticas furibundas a la gestión de Alberto Fernández y se centró más en mirar hacia el 2023, aunque en ningún momento dijo nada sobre una eventual candidatura.
“Eramos un pueblo alegre, volvamos a recuperar esa alegría que tuvimos alguna vez. La alegría de que el sueldo alcanzaba, la alegría de ir al trabajo, la alegría de saber que había futuro”, afirmó.
“Voy a hacer lo que tenga que hacer para nuestro pueblo recupere la ilusión”, dijo una Cristina que se mostró más peronista que ultra-kircnerista, buscando el halago a los “trabajadores y trabajadoras”.
“Hubo una Argentina en donde los trabajadores podían ahorrar y fue hace muy poco tiempo”, dijo.
Fue su reaparición pública luego de más de dos meses (el intento de atentado fue el 1º de septiembre). Cristina fue invitada por el secretario general de la UOM, Abel Furlán, y el acto se realizó en el Microestadio de Pilar. La vice subió al escenario con el intendente de Pilar, Federico Achaval y el jefe de la UOM.
“Quería estar acá porque, después de algunas cosas, no hay mejor lugar para estar que junto a los trabajadores y trabajadoras”, dijo.