Entre 10 y 15 mil tareferos serían expulsados a las villas miserias a raíz de la mecanización en el cultivo de yerba mate, desde la mirada de Hugo Sand.
En diálogo con Plan B, el reconocido dirigente agrario, fundador y presidente de la APAM, expresó que “la mecanización de la cosecha de la hoja verde de yerba no es sustentable socialmente”.
De esta forma, Sand sumó su voz al debate sobre la mecanización de la cosecha de yerba mate que se generó ayer a partir de un comunicado firmado por los tres directores del INYM por la producción y el representante del sector tarefero, quienes afirmaron que la utilización de cosechadoras “representa desplazamiento de mano de obra y, en consecuencia, crisis social”.
Estos directores del INYM emitieron un comunicado a raíz de los estudios que está realizando el INTA Cerro Azul sobre el impacto de la cosechadora de yerba mate en los rendimientos y en el yerbal.
“Tratar de que todos tengan trabajo”
“Como productores, misioneros y hombres de bien no tenemos que permitir que más misioneros sigan viviendo mal. Al contrario, deberíamos tratar de que todos tengan trabajo y que todos puedan ir para adelante”, afirmó.
Además, fue contundente respecto de que la mecanización tampoco solucionará el problema de la falta de mano de obra para la cosecha de la yerba mate.
“Esa solución va a venir por otro lado: que sea compatible el trabajo de los obreros que tienen planes con el trabajo formal”, sentenció, haciendo alusión a la necesidad de que se aceiten los mecanismos necesarios para hacer operativo el Decreto 514 de la Nación, que en los papeles compatibiliza planes y trabajo en blanco, pero que no está dando resultados por diversos motivos.
“Pasó lo mismo en los años 60 con el té“
Sand sugiere que es preciso “aprender” de lo que ocurrió con la actividad tealera en la década del 60, cuando se inventaron las cosechadoras y el té dejó de hacerse a mano: “Con 6 kilos de lote de té se compraba 1 kilo de lomito. Imaginate el valor que tendría hoy el kilo del brote de té. Desde Guaraní se exportaba al mercado libre de Londres. Hoy con toda la basura que se produce, aunque digan lo contrario, se exporta de Guaraní a Oberá”.
“La mecanización es un proyecto del capitalismo a ultranza, al igual que los agrotóxicos, para desplazar a la gente, no dar trabajo, concentrar el capital y para quedarse con la tierra”, explicó el obereño, quien paradójicamente vive a 5 minutos de la fábrica Lory, la empresa que inventó y desarrolla la cosechadora de yerba mate.
También detalló que “el pequeño productor yerbatero no podrá comprarse una máquina para cosechar yerba. Tendrá que buscar un intermediario, como estamos haciendo con el té”. Esta cuestión de depender de un tercero para la cosecha, hace que en el largo plazo, el producto pierda soberanía sobre su producción.
Por último, opinó que “la industria está feliz y contenta”, quiere eso porque habrá mucha materia prima y aseguró que “el consumidor en la góndola no pagará barato, sino que será siendo alto”.
Plan B/ 21-9-2022