Pablo Ruival es el country manager de Arauco Argentina, la empresa foresto industrial más grande del país que está invirtiendo 165 millones de dólares en Puerto Esperanza para “darle nueva vida” a la planta de celulosa de la ex Alto Paraná, que cumple 40 años.
En una entrevista exclusiva con Plan B, en las oficinas de Arauco Argentina en Olivos, Ruival trazó un panorama de la “muy buena” actualidad del negocio foresto industrial y su optimismo respecto al futuro, a pesar de la crisis económica.
“La Argentina sigue teniendo condiciones únicas y tarde o temprano la situación va a cambiar y creo que sigue siendo sumamente interesante invertir en la Argentina. Es un momento para aprovechar muchas oportunidades que surjan”, señaló Ruival.
Su declaración sorprende, pero no tanto. Es bastante parecido a lo que afirmó Paolo Rocca, CEO de Techint, en diciembre pasado cuando se mostró optimista por el futuro de la Argentina y dijo que “hay que saber leer las oportunidades de largo plazo”.
Arauco Argentina viene de un año 2020 muy bueno, a pesar de los dos meses iniciales de la pandemia con parate total (abril y mayo) que “vivimos con mucha angustia”. El año pasado, ya sin parate, fue aún mejor.
“Estamos invirtiendo 165 millones de dólares en Puerto Esperanza y es una señal muy importante del Grupo Arauco respecto a la Argentina. Los primeros 90 millones de dólares son entre 2020 y 2023 con el 70 por ciento ya ejecutado. Y los otros 75 millones de dólares
entre 2024 y 2026”, detalló.
Ruival es Licenciado en Administración de Empresas y asumió como Country Manager de Arauco Argentina en noviembre de 2019, en coincidencia con el cambio de guardia en la Casa Rosada. Trabaja en la empresa desde hace 20 años en áreas comerciales.
En una extensa charla con Plan B el jefe de la firma que es el mayor empleador privado de Misiones (2.000 empleados directos y 2.000 tercerizados) se refirió a los incendios forestales, el Infopro y las eternas oportunidades desperdiciadas en un sector que es el de mayor potencial para “crear empleos, riqueza y divisas” del país.
Arauco Argentina tiene tres líneas de negocios: celulosa, madera aserrada y los tableros (MDF y de partículas). En todas trabaja haciendo un mix entre el mercado externo e interno de acuerdo a variables como el precio internacional (la celulosa es un commodity que ahora
subió, como el petróleo, la soja o el trigo) y también el tipo de cambio en la Argentina.
“La forestoindustria es una industria de una nobleza única, por el lado de la materia prima, los árboles implantados son los que están en fuerte proceso de crecimiento y capturan en forma constante e intensa el dióxido de carbono. Mientras los productos terminados, son
todos son reciclables, reutilizables o biodegradables”, reflexiona.
-¿Hoy de lo que producen cuánto es exportación y cuánto mercado interno?
-Depende del negocio. El aserradero tiene un 80% de exportación, cuando históricamente es un 50 y 50%. En celulosa exportamos dos tercios y en tableros hoy está quedando un enorme porcentaje en el mercado externo, superior al 90% (Arauco hace tableros de partículas en su planta de Zárate y tableros de MDF en su planta de Puerto Piray).
-¿Y cuánto representa cada negocio dentro de la cartera de Arauco?
-En celulosa un 45 por ciento, tableros el 35 por ciento y el resto es el aserradero y la resina.
-¿La celulosa es siempre el negocio más importante?
-Al revés, no mucho tiempo atrás la celulosa tenía precios internacionales muy bajos y en tableros estabas muy bien. La celulosa siempre fue un bastión importante, que todo el mundo mira como una mina de oro, pero depende mucho de los precios. Si son malos, y nosotros tuvimos situaciones malas, el costo de mantener la planta de celulosa es enorme.
-¿Qué es un buen precio para la celulosa?
-Cuando digo “malo”, llegamos a tener precios del mercado de 500 dólares a China. Hoy se paga 900 dólares. Hubo precios mejores, no mucho más, alcanzó los 1.000 dólares.
¿Cómo les fue con la pandemia del Covid-19?
-La pandemia te obligó a enfrentar situaciones absolutamente desconocidas. Mantener las operaciones funcionando fue un desafío y lo vivimos como un logro, establecimos protocolos exigentes y contamos con la colaboración de la gente, que puso el hombro. También actuamos de forma muy coordinada con las autoridades de Misiones. En algún momento tuvimos plantas absolutamente paradas y jamás dejamos de pagar los salarios, pero hubo mucha incertidumbre.
-¿Y a nivel del negocio?
-El 2021 fue un año muy bueno. Mejor que el 2020, donde tuvimos dos meses de parate total (abril y mayo). El 2021 lo tuviste completo en esas condiciones, con una demanda muy sólida y funcionando normalmente las operaciones. Fue un sector que tuvo en el año 2021
un gran año.
-¿Les fue mejor con Alberto Fernández que con Macri, que paradójicamente buscó tanto promover la forestoindustria?
-Son dos situaciones diferenciadas. Lo que es el tema de las grandes devaluaciones que tuvimos en el 2018, generó resultados por la parte de costos en dólares más bajos, en logística, producción. Pero insisto que esa ventaja competitiva dura poco, con semejante nivel de inflación. Ahora tenemos buenos años por el lado de los precios. Sin entrar en comparaciones, el 2021 para la forestoindustria a nivel global fue un gran año. Para Arauco Argentina en particular fue un año muy bueno.
-¿Hay atraso cambiario y cómo los afecta a Ustedes?
-Hasta el Fondo Monetario Internacional está diciendo que no se puede seguir usando el dólar como ancla inflacionaria porque vas perdiendo competitividad. Tenés que tener un dólar que te permita ser competitivo a nivel mundial.
-¿Este dólar es competitivo?
-Si, no tanto como otros años. Esta misma pregunta la hacías un año atrás y el “sí” era más rotundo. El resto de los jugadores está también en condiciones de exportar. De hecho Argentina incrementó sus exportaciones de estos rubros independientemente de Arauco, en
el sector de la madera y tableros también.
-¿Cuánto facturaron en 2021?
-Aproximadamente, unos 525 millones de dólares.
-Una reflexión sobre lo que dejó la experiencia de los incendios en Misiones y el resto del país.
-Podríamos haber tenido en la provincia una crisis como la que tuvo Corrientes, pero no la tuvimos, fue mucho menor y en parte se debe a que estábamos preparados, se trabajó en conjunto entre el sector público con el privado y hubo una gran tarea de los bomberos. Acá
nadie se salva solo. Hace mucho tiempo que venimos trabajando conjuntamente en Misiones. Más intenso, menos intenso, pero siempre coordinando con organizaciones civiles, autoridades, empresas.
-¿Qué medidas tomaron?
-Desde la contratación de un helicóptero y dos aviones hidrantes. Uno lo teníamos en el Delta del Tigre y los otros dos en Eldorado, salían constantemente a atacar focos de incendio. El incendio forestal tiene una característica, tenés que dar una rapidísima respuesta, si no das respuesta rápida se va de control.
-¿Cómo los detectaban a tiempo?
-Tenemos un centro de monitoreo permanente en Yporá, con toda la tecnología. Tenemos las torres de vigilancia, con personas y también con cámaras con lentes sumamente potentes, con lo cual a través de eso vos podes detectar con mucha anticipación y dar las coordenadas perfectas de la ubicación al avión hidrante o la cuadrilla o a la intervención de los bomberos voluntarios.
-¿Los aviones ya quedan para la próxima temporada de verano?
-Depende, es muy probable que se vayan viendo cuales son las estimaciones climatológicas.
-¿Y la actitud del Gobierno Nacional en el tema de los incendios?
-Personalmente creo que hay un desconocimiento fuerte del potencial de la forestoindustria, de las ventajas que tiene. Incluso se la condenó con declaraciones públicas como responsable de gran parte de los incendios, cuando no lo es. Yo creo que en definitiva no hubo una previsión y después se buscaron los culpables del caso.
-¿Cómo están con las autoridades misioneras?
-Tenemos una relación muy fluida, interacción permanente con muchos ministerios. El año pasado no tuvimos un sólo conflicto sindical.
-¿El tema de la reactivación del puerto les sigue interesando?
-Sí, pero eso está en la gestión de la provincia. Nosotros con la logística interna operamos a través de camiones y los bitrenes, que nos han dado buenos resultados. Hoy tenemos 18 bitrenes y estamos invirtiendo en 10 más, para productos terminados. Además estamos
trabajando mucho con el ferrocarril de cargas.
-¿Qué pensas del Infopro (el Instituto Forestal Provincial)?
-Creo que el Infopro lo único que ha buscado es tener bajo control la recaudación de la tasa forestal que se podría haber logrado el mismo objetivo sin la creación de un instituto.
-Qué diferencia ves entre el modelo forestal de Misiones y Corrientes, se suelen plantear diferencias entre uno y otro.
-Misiones es una provincia madura en temas de foresto-industria, tiene plantaciones y mucha industria. Corrientes tiene todo por hacer, tenía los bosques y no tenía destinos para esos bosques, a mi me parece bien que Corrientes busque atraer inversiones. Hasta ahora han logrado un aserradero importante que está en construcción (el proyecto de Acon Timber, grupo austriaco-belga en Virasoro).
-¿Qué opinión tenés de la conducción en la provincia de Misiones?
-Me parece que se está conduciendo la provincia con una mirada estratégica que es muy interesante. Lo veo por ejemplo en todo lo que es la Escuela de Robótica, el impulso a una nueva forma de educación y el cuidado de los recursos naturales. Misiones es una provincia
que ha realizado un esfuerzo por cuidar la selva y está bien que ahora busque una compensación por esa cuestión. Lo que agrego es que también hay que tener en cuenta el esfuerzo de los privados por preservar el monte. Nosotros tenemos 110.000 hectáreas de reserva.
-¿Está bien que la Argentina exporte madera en bruto (rollos) de pino y eucaliptus desde los puertos de Entre Ríos a China y la India?
-Creo que es una pena. Argentina pasó de ser líder en foresto industria en la región a estar ahora por detrás de Chile, Brasil y hasta Uruguay. Ha perdido su rumbo, tiene condiciones naturales únicas para la forestoindustria que todavía no ha logrado descubrir y darse cuenta del potencial que tiene, no solo en la generación de divisas sino de miles de puesto de trabajo, sería una posibilidad para toda la Mesopotamia, para generar riqueza, divisas y sobre todo mucho trabajo.
-¿Cómo los están afectando los fuertes controles de capitales producto de la falta de reservas del BCRA, para producir, traer equipamiento, girar pagos al exterior?
-Nosotros tenemos una deuda que tuvimos que refinanciar (el BCRA le pidió a todas las grandes empresas que pateen para adelante pagos). Sí podemos pagar los intereses, no el capital. Pero la buena noticia es que no tuvimos problemas para acceder al mercado cambiario y llevar adelante todo el proceso de inversiones que es importante.
-¿Cuando te preguntan desde Chile cómo va la Argentina y hacia dónde va?
-Mirá, creo que la Argentina sigue teniendo condiciones únicas, y que tarde o temprano la situación va a cambiar y creo que sigue siendo sumamente interesante invertir en la Argentina. Creo que es un momento para aprovechar muchas oportunidades que surjan.
Ficha Personal / Pablo Ruival
Cargo: Country Manager de Arauco Argentina
Formación: Lic. en Administración de Empresas (UCA). Posgrado en el IAE (Universidad Austral).
Familia: Casado, 3 hijos
Hincha de: Boca
Plan B-26-3-2022