En el día de ayer se produjo el regreso de Lionel Messi a la actividad tras padecer Coronavirus, en un partido de gran expectativa en el que el PSG venció al Reims por la Ligue 1 de Francia.
Messi entró en el segundo tiempo y metió un pase gol para Verrati, que ya había marcado el primero. Los otros dos fueron del ex Real Madrid, Sergio Ramos, y el portugués Danilo Pereira.
Pero otro dato que llamó mucho la atención fue que en la camiseta, los jugadores tenían una leyenda en chino estampada en la espalda, ahí donde suele ir el nombre. Se trata de las iniciales o los nombres de los jugadores en chino. ¿Por qué se hizo? La excusa fue conmemorar el Año Nuevo Chino que se celebra en rigor el 1º de febrero.
Pero detrás de ello, hay un acuerdo del PSG con un grupo inversor chino, del cual se conocieron pocos detalles. El dato no llama la atención, a pesar de los petrodólares que tiene el Paris Saint Germain desde que el grupo qatarí se hizo cargo al comprar el 100% de las acciones del club en 2012 (Qatar Investment Authority.
Los chinos son los mayores inversores en grandes clubes desde hace unos años, superando a los países de Medio Oriente con sus petrodólares. Los chinos han invertido en clubes como el Inter de Milán y AC Milan (Italia), Reading (Reino Unido), Slavia Praga (República Checa), Olympique Lyon (Francia) o Atlético de Madrid (España).
¿La pregunta que queda picando es, qué pasaría en la Argentina, con clubes casi todos semi quebrados o en crisis económicas profundas, si se permite la entrada de los inversores al capital de los clubes, que hoy son asociaciones civiles sin fines de lucro?
En la Argentina ya se debatió largamente en el pasado si los clubes de fútbol podrían pasar a ser sociedades anónimas, permitiendo el ingreso de privados. Una idea que siempre contó con más detractores que defensores. Pero la profunda crisis económica que padece la Argentina y las necesidades de los clubes, pueden hacer regresar ese debate con otro resultado.