El 20 de julio de 1969 el astronauta Neill Armostrong se convertía en el primer ser humano en pisar la Luna y decía: “Es un pequeño paso para el hombre y un gran paso para la humanidad”.
En el día de ayer, cuando se cumplieron 52 años de aquella hazaña, Jeff Bezos -el hombre más rico del mundo-, también protagonizó un hito destacable. Viajó al espacio con su nave New Sheppard, construida y diseñada con fondos enteramente privados, convirtiéndose en el segundo hombre que realiza este tipo de travesías privadas al espacio después de Richard Branson, el dueño de la empresa Virgin.
El vuelo de Bezos en la New Sheppard duró algo más de 10 minutos y el calvo multimillonario, fundador de Amazon, aterrizó con el módulo en el desierto de Texas, sin contratiempos.
unto a Bezos estuvo su hermano Mark -quien dirige la fundación-, la aviadora Wally Funk, quien a sus 82 años será la astronauta más vieja de la historia, y el holandés Oliver Daemen, de 18 años, quien se convertirá en el más joven en realizar una travesía semejante. El holandés se convirtió en el primer pasajero que pagó su ticket al espacio, ya que su padre, un inversionista, fue quien ganó una subasta para conseguir ese asiento.
El tiempo dirá si los progresos sorprendentes de Bezos se convierten en otro enorme paso para la humanidad o simplemente se trata de un carpicho de un multimillonario que ya no sabe que hacer con su dinero.