A pesar de la pandemia del Coronavirus y las restricciones que impuso a la economía en todo el mundo, una de las mayores obras de infraestructura de la Argentina de los últimos años como es Aña Cuá se lanzó y sigue avanzando.
En el día de hoy la EBY compartió fotografías y difundió un comentario sobre el primer año de obras para maquinizar ese brazo del río Paraná donde se colocarán tres turbinas adicionales, a las 20 de la represa de Yacyretá.
Su casa de máquinas albergará 3 turbinas tipo Kaplan con una potencia instalada de 276 Megavatios, lo que permitirá ampliar la capacidad de generación de energía de la Central Hidroeléctrica Yacyretá entre un 9% y un 20% según fluctúe el nivel de agua del Río Paraná.
“Estamos trabajando día y noche, de manera continua, respetando estrictamente los protocolos de bioseguridad y cumpliendo todos los plazos. Proyectos que se construyen, realidades que se ven. Hoy, a sólo un año del inicio de las obras para la nueva central hidroeléctrica del
complejo Yacyretá, podemos decir que realizamos: 950.000m3 de excavaciones de suelo; Montajes de una planta de trituración; Hospedajes para el personal y talleres de mantenimiento y hormigonado de nivelación para la cimentación de la nueva centra”, señaló la EBY en un comunicado.
“Esta obra se construye sin generar impacto ambiental ya que no se incrementa la superficie de embalse ni demanda nuevas presas o relocalizaciones generando tres mil empleos directos e indirectos”, recordó la entidad.
El obrador donde se está realizando el “pozo” en el cual se instalarán las tres turbinas Kaplan y la sala de máquinas, que ya se están fabricando en Alemania. Los profesionales que, con estrictos protocolos, siguen avanzando en una obra de infraestructura de las más importantes de los últimos años en la Argentina. El brazo Aña Cuá, hoy un vertedero ecológico donde se deja correr el agua del río que el día de mañana generará energía limpia. El titular de la EBY, Ignacio Barrios Arrechea, recorrió las obras a un año del comienzo de las mismas. “La tenemos que terminar en el tiempo que dijimos (cuatro años) por el dinero que se presupuestó (unos u$s400 M).