Plan B en Asunción.

Funes de Rioja, de la UIA, sobre la falta de resultados del plan en el nivel de actividad: “Del lado nuestro hay ansiedad”

ASUNCIÓN (Enviado). El presidente de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja, afirmó hoy que los empresarios industriales están ansiosos y aguantando la recesión, tratando de no despedir empleados, a la espera de la recuperación de la economía.

“Del lado nuestro hay ansiedad”, reconoció Funes de Rioja, quien negó que por ahora se vean “brotes verdes” o sectores que se están recuperando.

El dirigente empresario estuvo en Asunción, en el centro de convenciones de la Conmebol, participando XIV Foro del sector privado de las Américas, que se realiza como evento colateral a la 54° asamblea anual de la Organización de Estados Americanos.

Como una de las principales figuras del sector privado de la Argentina, Funes de Rioja recibió las consultas de sus colegas de otros países sobre el proceso político y económico que vive el país y que impulsa el Gobierno Nacional de Javier Milei.

En todo momento, Funes de Rioja dejó en claro que no quiere interferir de ninguna forma, aunque en una charla de más de medio hora con los periodistas, tampoco dio grandes muestras de entusiasmo por el rumbo económico.

“Como empresarios tenemos que tomar un rol de no interferir, sino interrelacionarnos para que entiendan que necesitamos al industria para crecer, no solamente recibir cuando ‘te tiran algo’, que está mal,  sino que el beneficio sea conjunto”, explicó.

“Tenemos la vocación y la voluntad de colaborar, siendo objetivos, y cuando hay una situación dramática hay que ponela sobre la mesa con el debido tacto para no generar pánico”, indicó.

Funes de Rioja explicó que la Unión Industrial Argentina apoya la sanción de la Ley Bases, que se discute en Diputados esta semana, aunque tiene observaciones, sobre todo respecto a los beneficios para importar que da el RIGI.

“Primero que quede en claro que la posición de la UIA, la Ley Bases tiene que aprobarse”, indicó.

“Dentro de ello hay algunas cuestiones que hemos planteado, otras esperamos que sean contempladas en la reglamentación o en un instrumento separado”, explicó.

La central fabril está objetando que se eliminen aranceles para que los grandes proyectos de inversión en minería o energía puedan importar componentes del exterior sin pagar aranceles, que se puedan fabricar acá, dejando a los productores locales en desventaja.

Objetamos “algunas de las normas que hablan de qué es lo que puede importarse, planteamos esto: cuando hay producción nacional, que no se genere una asimetría con la presión fiscal nacional y liberar los aranceles para importar, esto se llama igualdad de condiciones paridad, no es discriminación ni es privilegio”.

El próximo martes el Consejo Ejecutivo de la UIA va a recibir en la sede de Avenida de Mayo al enviado de Luis “Toto” Caputo, Juan Pazo, encargado de las áreas productivas de economía, a quien le van a realizar estos mismos planteos sobre la Ley Bases.

“Al principio pensábamos en la UIA que había asumido al frente del ministerio de Economía un financiero, ahora lo vemos como un ministro de economía con una mirada que abarca todo”, indicó.

La UIA viene celebrando reuniones en el Congreso, con legisladores oficialistas, y de todo el espectro opositor para dejar en claro su postura y sus deseos respecto a algunos puntos de la Ley Bases, explicó Funes de Rioja. Quien para despejar cualquier duda sobre la posición fabril, se refirió varias veces al “Libro Blanco” que editó la UIA, donde explicita su postura.

funes de rioja
Daniel Funes de Rioja, presidente de la UIA.

Consultado sobre los brotes verdes, Funes dejó en claro que no los ve por ahora.

“Esto es heterogéneo, hay una expresión de los americanos, que dice que no toda medida aplica para cualquiera. Hay sectores como energético, minero, donde les ha golpeado más bien poco (la recesión), hay otros, sí, que siguen sufriendo en rangos (caída de la actividad) del 20 o 25 hasta el 40 o 50 por ciento. ¿Si tocamos fondo o no? Hay algunas señales ahora cuando uno analiza los datos, estamos mirando una encuesta en el caso de la UIA, pero no es universal, son 1.200 empresas, que pueden estar insinuando una tendencia, pero yo no puedo hacer un diagnostico y un pronóstico”.

El dirigente fabril también aseveró que “la gente no se rindió, el empresario no se rindió, esta cuidandose en el mal momento, esperando la reversión”.

Consultado sobre la necesidad de una nueva devaluación para ganar competitividad, Funes indicó que “esto se arregla o devaluando para seguir adelante o se arregla haciendo las reformas necesarias para que el costo argentino baje, hemos analizado siete impuestos y de esos 7 somos campeones en seis”.

Y dio como ejemplo “el problema de logística, hicimos en un sector hace unos años, tres barras de producto: 15, 20 y 30 por ciento el costo de logística, triplica el costo internacional, es más caro traer desde Córdoba a Buenos Aires que exportar a otros mercados. No tenemos tratados de libre comercio, hay productos que tienen márgenes muy chicos, y si (con estos sobrecostos) te pasas 1 dólar, el mercado te lo sacan los chilenos, con el debido respeto”.

“Nosotros creemos en la integración en paridad de condiciones. Sáquenme las asimetrías, me pusiste una pesa en los pieza, me ataste los manos en las espalda y me tirás al mar y me decís ‘nada'”, en referencia a su postura respecto a la apertura que podría impulsar el Gobierno Nacional.

Funes de Rioja también aseguró que “hay que tener fe en el plan”, pero al ser consultado sobre si los empresarios tenían esa confianza, retrucó que  “era inevitable pensar en una transición después del desparramo y el despilfarro que se hizo antes, más todo el tema de las importaciones, que quiero aclarar, siempre fue todo por derecha (en referencia al acceso a las divisas en la época de Massa). Pero en los últimos tres meses del Gobierno anterior, no se oliven de que hubo un sobreestoqueo. Que si uno tenía un kiosko, lo llenaba. Bueno, esas cuentas se pagan”, indicó.

“El presidente  de una multinacional que se jubilaba, mandó a los vendedores a vender todo hasta diciembre, repartió medallas del mejor vendedor del año, cobro un buen bono, y después el que vino me decía: ‘yo por seis meses no voy a vender nada’, y estoy hablando de una multinacional de primer nivel”, graficó, sobre una de las razones por las cuales también cayeron las ventas y la producción fabril en este primer semestre del año.

Plan B/ 25-6-2024

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