En medio del drama y a poco de que el fuego alcance el centro de operaciones desde donde la fundación Rewilding Argentina monitorea a los yaguaretés que se encuentran libres en el Iberá, una noticia trajo alivio y alegría: volvieron a captar señales de los collares satelitales y GPS que tienen colocados los felinos, lo que implica que están activos.
Y no solo eso. Las cámaras trampa que se encuentran ubicadas en distintos lugares mostraron a dos ejemplares hembras en compañía de sus cachorros, según se informó desde la Fundación, quien lleva adelante una tarea de cuidado y repoblación de animales en esa región.
Todos los collares indican que Juruna, Mariua, Arami y Jatobazinho se encuentran activos en diferentes sitios en torno al Centro de Reintroducción del Yaguareté (CRY). Además, Rewild Argentina informó que, por observaciones en cámaras trampa, Juruna y Mariua aún se mueven cada una con sus cachorros.
La buena noticia se conoció en medio de la lluvia que aplacó el fuego y la extrema tensión que había en torno al refugio donde se realiza el monitoreo y se trabaja con animales en recuperación y aclimatación. En las últimas horas, el fuego estaba a pocos metros del lugar y ya se había iniciado la evacuación de corrales y animales para evitar una tragedia mayor a la que ya afectó a la fauna de la región.
En el lugar, unas cincuenta personas trabajaron noche y día para evitar el avance de las llamas, diseñando y realizando cortafuegos. Finalmente llegó la lluvia y, con la lluvia, llegó algo de tranquilidad.
Los posicionadores satelitales de los animales volvieron a arrojar sus coordenadas y confirmaron que están a salvo. A esto se suma otra buena noticia para los conservacionistas y es que volvieron a ver a Caraguatá, una hembra de muitú que había sido liberada en diciembre pasada y a la cual le habían perdido el rastro.
Sin embargo, hace algunas horas la volvieron a avistar, incubando huevos en un nido construido por su pareja, Curupí.
En ese lugar donde Caraguatá anida, el fuego pasó por debajo, quemando hojarasca pero, casi milagrosamente, sin afectar a los árboles. El viernes la Fundación tenía previsto evaluar el estado de los corrales y espacios especiales para comenzar las tareas de reparación y regresar allí a los yaguaretés que aún no fueron liberados y a las nutrias gigantes.
Es que como consecuencia del avance del fuego, ya se había realizado parte del traslado de animales a sectores más seguros. “Las semanas pasadas nuestros equipos de Rewilding en los Portales Yerbalito y Cambyretá debieron retirar muitúes que estaban atravesando su período de adaptación en un corral de presuelta —que fue destruido por el fuego—, seis huevos de muitú y nidadas de guacamayos rojos, incluyendo a cuatro pichones y dos adultos, Nioky y Sopa. A todos los trasladamos al Centro de Conservación Aguará, en Paso de la Patria, Corrientes”, informó Rewild Argentina en sus redes sociales.
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