Hoy a las 14.50 cuando se produzca el arribo del primer vuelo de la aerolínea low-cost JetSmart, se producirá un hecho trascendente para la historia aerocomercial de Misiones: por primera vez en casi 30 años, Posadas tendrá tres empresas llegando de manera regular al aeropuerto General San Martín.
JetSmart llegará con sus modernos aviones Airbus A320 a la pista de 2.200 metros del aeropuerto internacional de Posadas, y se sumará así a Flybondi y la histórica Aerolíneas Argentinas. Las tres compañías vuelan a la capital misionera desde el Aeroparque Jorge Newbery.
La low-cost JetSmart ofrecerá tres vuelos semanales (martes, jueves y sábado), siempre con sus cuatro modernos aviones (los compraron 0KM para empezar a operar en el país hace 3 años).

A esto se suma el vuelo diario de Aerolíneas Argentinas los siete días de la semana y los cinco vuelos semanales de Flybondi (lunes, martes, miércoles, viernes y domingo).
Otro dato: será una de las primeras veces que un Airbus A320 (el equivalente al Boeing del fabricante europeo) toque el pavimento del General San Martín (186 asientos). Aunque ya hubo ocasiones en que por estar cerrado el aeropuerto de Iguazú, aterrizaron en el San Martín los A320 de LATAM (Posadas está acostumbrada a los Boeing 737 y los Embraer 190).
Esto de recibir tres aerolíneas regulares dis tintas en la capital misionera no sucedía desde principios de los 90, cuando estaban Aerolíneas Argentinas/Austral, y también se sumaban LAPA y CATA, un auge del mercado que duró unos pocos años, confirmó a Plan B, Oscar Bazzani, un histórico técnico aeronáutico que trabajó para Austral en Posadas y escribió un par de libros sobre aviones, incluyendo una investigación sobre la tragedia del vuelo 2553 que se estrelló en Fray Bentos, tras haber despegado de la capital misionera el 10 de octubre de 1997.
También a fines de los años 80, cuanto Austral era una empresa privada independiente de Aerolíneas Argentinas (que la iba a terminar absorviendo nuevamente), llegaba a Posadas junto a Aerochaco, un emprendimiento del gobierno de esa provincia que tuvo un auge entre los 60 y los 80 y en la década pasada intentó reflotar con poco éxito Jorge Capitanich.
Pero desde la quiebra de LAPA en 2003, Aerolíneas Argentinas y Austral (ya la misma empresa) volaron en soledad a Posadas durante más de 20 años hasta la irrupción de las low-cost y la llegada de Flybondi en 2018.
Escala poco rentable
Posadas siempre fue considerada una escala poco rentable para empresas distintas a Aerolíneas Argentinas y Austral, subsidiadas por el Estado Nacional.
Según las cifras de la ANAC del 2019, Posadas fue la aeroestación número 19 del país en volumen de pasajeros con 318.000, lejos de Iguazú con 1.560.000 ese año. Por delante de PSS (sigla aeronáutica para Posadas) están Aeroparque, Ezeiza, Salta, Rosario, Río Gallegos, El Calafate, El Palomar, Comodoro Rivadavia, Trelew, Neuquén, Córdoba, Bariloche, Jujuy, Mar del Plata y Mendoza.
Durante años, LATAM (ex LAN Argentina) la única otra aerolínea que operaba en el país, nunca consideró llegar a la capital misionera.
Pero el modelo low-cost que impuso Flybondi agrandó la torta de pasajeros de avión (a expensas de los buses de larga distancia).
Ahora que el Gobierno Nacional parece haber ratificado el modelo de las low-cost, JetSmart y Flybondi están lanzadas a una agresiva competencia para acaparar una buena parte del mercado, lo cual deriva en precios atractivos y también una competencia por sumar escalas nuevas.
El año pasado LATAM decidió dejar de operar en la Argentina, dejando un “agujero” en el mercado que ahora las low-cost sobrevivientes están intentando ocupar.
“Somos baratos porque somos eficientes y por eso podemos ofrecer tickets a bajo precio”, explicó a Plan B, Fernando Guevara, director de Comunicación de JetSmart.
El modelo de negocios de la firma propiedad de un fondo de inversión norteamericano, incluye tener modernos aviones de la misma flota (todos Airbus A320) lo cual redunda en menores costos de mantenimiento. Además, los asientos ya están reclinados y se ahorra dinero en esos mecanismos que son costosos.
Todos los detalles suman para que el modelo low-cost sea posible. “Como cada aeropuerto cobra en dólares por la permanencia, es importante llegar a tiempo y cumplir los horarios”, explicó Guevara.
Además, a diferencia de Aerolíneas Argentinas y Flybondi, JetSmart no tendrá personal propio para atender la escala Posadas, sino que lo realizará a través de la empresa Swissport, que terceriza servicios de despacho de aeronaves, estibaje, tráfico y catering, confirmaron a Plan B en la compañía.
Para Posadas es una excelente noticia y en la medida que el modelo low-cost se consolide, podrá contar con una nueva alternativa de conexión al resto del país. También contribuirá a eso el perfil turístico que busca tener la capital de Misiones, con eventos como la próxima carrera del Turismo Carretera, el 22 de agosto.

FIN