El reconocido dirigente agrario Hugo Sand, fundador y presidente de la APAM, rompió el silencio y dio su opinió sobre el rumbo de la política productiva con un extenso editorial publicado hoy en el diario Primera Edición en el que llama a dar un giro y darle un verdadero apoyo a las chacras misioneras, más allá de los anuncios o algunos programas.
“Nos falta la voluntad política de los representantes del pueblo que ocupan los poderes del Estado”, dice Sand en el extenso escrito.
“Necesitamos que más allá de los anuncios y algunos programas, los organismos y funcionarios públicos inclinen la balanza definitivamente a favor de la producción agraria, de las pequeñas y medianas industrias locales y de la biodiversidad, esto es: a favor de la mayoría, del pueblo”, señala el dirigente.
En el artículo llama a repensar el modelo productivo de Misiones. “Desde APAM proponemos repensar el modelo de producción en defensa de nuestra querida Misiones, la hermosa”, agrega, citando a Alberto Roth a quien define como “el sabio suizo”. (Roth fue uno de los primeros ecologistas que tuvo Misiones y un ferviente defensor del suelo y el monte, fallecido en 1985).
Sand pone como ejemplo en su artículo de opinión la cuestión del fomento -incorrecto a su entender- del Estado a la plantación de pinos, que además no cumplieron con la promesa de ser “una jubilación” para los pequeños productores que adhieron a esa política tan promocionada en décadas pasadas.
“Hace pocas semanas planteamos al gobernador de Misiones, Oscar Herrera Ahuad, la necesidad imperiosa de decretar la veda total de la tala de árboles nativos y limitar la plantación de especies exóticas, específicamente de pinos y eucaliptus que son los que más se han extendido y que, en el caso del primero, se comporta como invasora, con alto poder de ocupación del territorio”, explica el dirigente agrario.
Sand explica que él también, como muchos otros productores chicos, plantó pinos a partir del fomento que otorgó la ley 25.080 (otorga subsidios a los plantadores, como incentivo para una inversión que es muy de largo plazo).
Haciendo cuentas, Sand llega a la conclusión que aquella promesa de “que íbamos a tener asegurada nuestra jubilación” no se cumplió con esta ley que ya tiene 25 años. Y haciendo cuentas llega a la conclusión que hoy una hectárea de pino plantada tiene un rendimiento de 70 pesos por día, tomando en consideración los valores que se están pagando por la materia prima forestal.
Sand luego explica que tomó la cuestión forestal como ejemplo, pero que su planteo se extiende más allá.
“El planteo general de este escrito es un tema de todos los misioneros”, dice.
“Tenemos que hablar y retomar el camino de la ética, de la moral y de la espiritualidad. Si el hombre está mal consigo mismo, estará mal con sus conciudadanos, estará mal también con el suelo, con la naturaleza, y no podrá brindarse con lo mejor que tiene que es precisamente su condición de ser humano”, se explayó.
Plan B/ Fuente Primera Edición, nota de opinión de Hugo Sand publicada el 16-6-2022