El INDEC informó hoy que el desempleo bajó a 6,2 por ciento en el segundo trimestre del 2023, lo cual implica una caída respecto al 6,9% que ostentaba en el mismo lapso del 2022.
También cayó respecto al 6,9 por ciento que exhibía en el primer trimestre del año.
Las estadísticas divulgadas por el INDEC reflejan que, entre la población en condiciones de trabajar, son más los que no trabajan que los que sí lo hacen.
En total, hay 15,4 millones de personas que no trabajan, contra 13,1 millones de personas que sí lo hacen. Este número surge del total de 29,4 millones de personas que viven en los 31 aglomerados urbanos que releva el INDEC en la Encuesta Permanente de Hogares.
Este total (29,4 millones) incluye a empleados (13,1 millones), desempleados 0,9 millones y los que no trabajan ni buscan trabajo (15,4 millones) que pueden incluir niños, ancianos (también), adolescentes, y por supuesto una gran cantidad de personas que se consideran fuera del mercado laboral porque no buscan trabajo.
Cómo se dividen los que sí trabajan
Entre las que trabajan, hay un total de 6,1 millones de personas en blanco, 3,6 millones de personas en negro (sin descuento jubilatorio) y 3,4 millones de personas que no son asalariadas (cuentapropistas, profesionales, etc).
Esta baja se produjo a pesar de que el Producto Interno Bruto cayó 4,9% en la comparación interanual, y 2,8 % entre el segundo trimestre y el primero, según el Indec.
Sin embargo, el contraste entre el desempleo en baja y la crisis laboral derivada de los salarios bajos, en negro, la precarización o directamente los empleados que viven bajo el nivel de pobreza, incluso a pesar de ganar salarios en blanco, no es reflejada por este indicador.
Según pudo consultar Plan B entre algunos especialistas, una de las causas es que el INDEC toma como persona empleada a cualquiera que trabaja un mínimo de horas a la semana.
Por ejemplo, una persona que hace changas de pinturas y reparaciones un par de veces por semana, para el instituto no es un desempleado.
Para el INDEC, también, no está desempleado aquel que no busca activamente trabajo. Con lo cual, muchas personas que ya no se molestan en trabajar porque prefieren vivir de planes sociales, por ejemplo, tampoco están en la estadística como desempleados.
Por ejemplo, en el informe del INDEC se especifica a qué se refiere con “Población desocupada”.
Se trata de aquellas “personas que, no teniendo ocupación, están buscando activamente trabajo y están disponibles para trabajar. Este concepto no incluye otras formas de precariedad laboral tales como personas que realizan trabajos transitorios mientras buscan activamente una ocupación, aquellas que trabajan jornadas involuntariamente por debajo de lo normal, las personas desocupadas que han suspendido la búsqueda por falta de oportunidades visibles de empleo, las ocupadas en puestos por debajo de la remuneración mínima o en puestos por debajo de su calificación, etc. Estas modalidades son también relevadas por la EPH, como indicadores separados”, indica el reporte.
Plan B/ 20-9-2023
