En el día de ayer pescadores presuntamente paraguayos ingresaron a una zona prohibida cercana a la represa de Yacyretá y efectuaron disparos para amedrentar al personal de seguridad de la represa.
Según pudo saber Plan B, de fuentes de la EBY, “ingresó una embarcación en zona prohibida, se dio aviso y se informó que desde la embarcación efectuaron disparos con armas de fuego”.
Según las fuentes, los disparos fueron efectuados “para amedrentar al personal de la EBY y de la Armada paraguaya”.
La depredación de los recursos ictícolas del río Paraná es una constante en los últimos años, con pescadores furtivos casi siempre de nacionalidad paraguaya que tienden redes aguas abajo de la represa.
Hay que recordar que los peces se desplazan río arriba, en contra de la corriente del Paraná, y por eso Yacyretá tiene ascensores especiales para permitir que estos puedan seguir su curso.
En ciertas zonas aledañas a la represa se reúnen miles de peces, esperando ingresar al ascensor. La depredación allí de dorados, pacúes, surubíes, sábalos y otros ejemplares es constante, porque los tienen todos juntos y sin poder desplazarse.
La represa transformó totalmente el panorama y ya no hay, río arriba, tantos ejemplares de Dorados, Pacúes y otros como antes, según cuentas los pescadores.
Es por eso que pescar del otro lado de la represa, aguas abajo, en zona prohibida, es muy tentador para pescadores que eluden los controles y se desplazan por aguas argentinas y paraguayas.
La Prefectura Argentina ya incautó y detuvo a varios de estos pescadores furtivos cuando los encontró en jurisdicción nacional.
La Argentina tiene fuertes leyes de prohibición que en general, son acatadas por los pescadores nacionales. Sin embargo, Paraguay no muestra el mismo ímpetu por detener la pesca furtiva que nuestro país.
Plan B / 20-8-2023