Por Diego Eliff y Martín Boerr
Héctor “Negrito” Rodríguez, candidato a intendente de Posadas el próximo 7 de mayo por un sublema de la Renovación, está de vuelta en la arena política y en forma inesperada.
Su amigo Joaquín Losada, a quien acompañó en la gestión 2015-2019 al frente de la capital misionera, siempre le repetía en charlas y mateadas: “A nosotros ya nos jubilaron, Negrito”.
Luego la llegada de la “topadora” Stelatto, hizo empalidecer la imagen de aquella gestión, hasta instalar el pensamiento en muchos de que Losada, además de no contar con los fondos de los que goza el actual alcalde y ni tiene el mismo apoyo de Rovira, también estuvo algo falto de gestión y trabajo.
“No estoy de acuerdo, no lo veo así. Tuvimos una época económica muy mala, pero además, nuestra gestión tenía cercanía a la gente, a los barrios, en cambio esta gestión de Stelatto se caracteriza por concentrarse en una parte de Posadas, que está linda, si, pero se olvida de los barrios más postergados, la Municipalidad no llega ahí y los funcionarios no quieren ver lo que pasa allí”, explica Negrito.
Para “Negrito” la visión a largo plazo de Rovira es muy acertada y está llevando a la provincia hacia el futuro, pero después los funcionarios que están abajo no tiene que estar para aplaudir y vivar al jefe y olvidarse de la realidad actual, sino que tienen que estar en el “cara a cara” con la gente, resolviendo problemas y “poniendo el cuerpo a la gestión”.
“Los de abajo tenemos que trabajar en el hoy, para que Rovira pueda tener la soltura de pensar en el futuro. Hay una Posadas linda, si, y es un 10 o 12 por ciento, y una Posadas pobre que crece y crece con barrios populares que todos los días se agrandan”, señala.
Para Rodríguez, se impuso entre las segundas y terceras líneas de la Renovación “la tecnocracia pura” con un “funcionariado que está alejado de la gente y no ve o no quiere ver porque no le conviene lo que pasa en los barrios”.
Lo que dice el ex secretario de Servicios Públicos de Posadas es una visión muy compartida en las charlas en off con dirigentes, y una situación que el oficialismo logró solventar solamente gracias al extraordinario de conacto “uno a uno” de Oscar Herrera Ahuad, la figura que se transformó en la cara amable del oficialismo en estos tiempos difíciles, con una cercanía y empatía que, incluso, hace empalidecer la del propio Hugo Passalacqua.
Un político sin nada que perder
A los 50 años el hijo de “Cachilo” está impecable físicamente, a pesar de que ya podría ser abuelo. Negrito se casó por primera vez muy joven, a los 21 años con su novia de “toda la secundaria”.
Tiene cuatro hijos hijos, dos con su primera esposa: Maria Sol (28 años, una Bióloga que trabaja en AstraZeneca, el laboratorio que trajo la vacuna Anti-covid); y Bianca (26 años, Médica residente en Buenos Aires).
Luego vienen Mateo (18 años, cursa 6° en el Janssen) y Tiago (12); estos con su actual esposa. “Me casé por segunda vez con todos los papeles, je”, aclara, con una sonrisa.
En el tiempo que estuvo “jubilado” de la política, Negrito, ingeniero agrónomo de la Universidad del Salvador, se dedicó a sus forestaciones en un campo en Corrientes, en el límite con Misiones en la zona de San Borgita.
Y por supuesto, le dedica también mucho tiempo al deporte, el running, el ciclismo y el básquet. Negrito, también, es el presidente del club Luz y Fuerza.
Hasta que recibió un llamado de Hugo Passalacqua, con quien nunca perdió el contacto, y quien le pidió que vaya como candidato a intendente en estas elecciones.
Cuando se refiere al principal candidato de la Renovación, se nota que lo hace con afecto y que podría no haber dicho que “sí”, en caso de que la propuesta se la hubiera hecho alguna otra figura del oficialismo.
En la charla en la redacción de Plan B, queda claro que su temprana jubilación de la política dejó una herida, pero no hay indicios de resentimiento.
Más bien parece un hombre con su vida hecha, que podría vivir perfectamente sin la política y se nota en su discurso, desprovisto de estas notas de obediencia ciega, obsecuencia y respeto a rajatabla del libreto oficial que destilan otros candidatos.
Hoy en día, exactamente lo que la gente quiere: políticos que no parezcan políticos y si es posible, que muestren menos ambición política y algo de vocación se servicio, pero genuina.
Posicionamiento
A la hora de perfilarse entre una elección que tendrá a 44 candidatos (11 de ellos por la Renovación), Rodríguez eligió trabajar en las villas y barrios más postergados de Posadas, exactamente lo que el slogan de la Posadas Linda de Lalo no muestra ni vende en su discurso.
-¿Por qué querés ser intendente de Posadas?
-Compartimos la visión política que tiene nuestro candidato a gobernador, la mirada de la política y cómo debe actuar para cambiar la realidad, comparto 100 por ciento el pensamiento de Hugo Passalacqua es la forma que necesitamos en estos tiempos difíciles.
-¿Y qué podés aportar?
-Cuanto todo escasea hay que estar muy cerca de la gente, tiene que ser cara a cara. Creo que hay que tener un plan de acá a 20 años, pero la realidad hay que atravesarla, hay personas en una situación muy difícil, sin trabajo, dependientes de comida del comedor o de un plan social, si esa persona ve a un gobernante distante es muy complicado.
-¿Cómo vas a salir?
-Trabajo para salir primero.
-¿No te parece que “Lalo” está muy fuerte?
-Sí, es el desafío más grande que tenemos. Y es lo que más me gusta, cuando me dicen que no puedo.
-¿Qué tenés vos que no tenga él?
-Cercanía. Para mí, el cuerpo a cuerpo es lo que marca la diferencia. No digo que lo mío sea bueno y lo de él malo, pero es distinto.
-¿Cómo está Posadas?
-Veo dos realidades distintas, que son muy notorias. Hay una Posadas invisible para aquél que sólo circula por el centro, la Costanera o las avenidas. El circuito 1 o el centro es una zona minoritaria de la ciudad, el 10 o 12 por ciento donde vivimos. El resto vive otra realidad.
-¿Y qué está pasando ahí? El otro día el propio Oscar Herrera Ahuad reconoció que en Misiones crecen las villas.
-Si es así, están creciendo y la demanda más grande tiene que ver con viviendas. Tenemos una propuesta que tiene que ver con un plan de vivienda municipal, hoy las personas te piden madera, chapa para establecerse en un lugar, se están agrandando las villas.
-¿Impactó la crisis y la altísima inflación?
-Hay muchísima gente a la que le aumenta mucho el valor de los alquileres y se le hace imposible pagar un alquiler, incluso a un empleado municipal, alguien que tiene un trabajo formal. También llega mucha gente del interior que viene a buscar alternativas.
-¿Y de otros lugares del país? El gobernador dijo que crecían porque venían para acá del Conurbano y otros lugares.
-Si, también vienen de otras provincias. También, veo en Misiones a muchos colombianos, paraguayos, algo que no se veía. Crece fuertísimo, El Porvenir 2 , o el barrio San Onofre, que queda a 15 cuadras de la rotonda. Ahí hay un sector de colombianos, cerca de un arroyo que están entubando, hay muchas familias colombianas.
-¿Se perdió la cultura del trabajo en los barrios?
-Hay de todo, veo las dos situaciones. El que tiene muchas ganas y sale y corta el pasto, chanquea, pinta, la construcción mueve mucho. Y ahora que el dólar subió tanto, se para inmediatamente la construcción privada porque la gente compra dólares en lugar de hacer refacciones o para todo por las dudas. Y también está la otra situación, pero no es tanto que se perdió la cultura, sino que hay personas, hombres y mujeres que se perdieron en la droga o el alcohol y ahí si, esa persona está quieta.
-¿Y qué puede y debe hacer el oficialismo para paliar esto?
-Yo creo que lo que nos debemos es un plan, y me refiero a un plan local o municipal. El gobierno provincial tiene un plan hace escuelas, obras, infraestructura, y va dirigido a donde nosotros queremos. Pero no veo a un gobierno municipal enganchándose y me refiero al intendente que sea, trayendo a la gente en el mismo sentido.
-¿No lo hace esta Municipalidad?
-No, el municipio se saca de encima los problemas que son graves, y lo hace porque es más fácil sacarse de encima los problemas.
-¿Un ejemplo?
-La alimentación, hay todo tipo de merenderos y comedores, que dependen de una organización social o de otra, del Ministrio de Desarrollo Social, de la Municipalidad, que asiste con raciones desde alguna cocina centralizada. Hay un quilombo…Y ves a un chico que la mamá lo manda con su tapercito y va a una cocina y le dicen “no nene, tenés que ir allá a tres cuadras”.
-¿No hay gestión?
-La Municipalidad no quiere saber. Los políticos no hablan y si no se habla, creen que no pasa. Pero con Hugo vengo hablando de política hace tiempo, compartimos la gestión, él sí tiene cercanía.
-¿Qué otra cuestión hay que mejorar?
-Tenemos el 70 por ciento de la ciudad sin cloacas. Debemos ser la capital de provincia con menos cloacas del país, yo no me animaría a decir si fuera el intendente que Posadas está linda con un 70 por ciento de déficit de cloacas.
-Pero la gente no tiene una imagen tan buena de la gestión de Losada...
-Nos tocó bailar con la más fe, Macri gobernando, nosotros acá, una Municipalidad que venía de recibir todo de Cristina Kirchner pasó a tener nada. Yo asumí en Servicios Públicos y teníamos 4 camiones para recolectar la basura, a Lalo le entregamos camiones que ni habíamos llegado a estrenar.
-¿No le faltó trabajo a Losada?
-Yo creo que peleamos sin armas. Hay que ver lo que hubiera sido la gestión de Joaquín con armas.
Plan B/ 24-4-2023